Capitulo 25 (85) 3era Temporada

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Que día mas duro fue el de ayer, después de que a Mischa se la llevo la ambulancia, tuve que partir yo hacia el hospital. Pase toda la noche allí, a pesar que no me permitían pasar a verla, no desistí y por suerte me anunciaron que probablemente por la mañana tendría el permiso
No regrese a la central, a pesar de que ya era de día, tampoco tenía intenciones de hacerlo a menos ...que me llamaran. Salí del edificio con la idea de comer algo, pase el enorme jardín de flores azules del hospital y llegue a un pequeño restaurante, mire de derecha a izquierda y la única mesa que estaba sola era una al rincón, tan calmado como el viento me deje caer en la silla, de inmediato une mujer joven quien asertivamente era la mesera apareció con el menú sujetado a su pecho, esta muchacha inspiraba una infinita frescura. Sin embargo preferí ser claro y serio diciendo de una vez por todas que solo quería café. La fresca mesera demoro menos de cinco minutos en llevármelo. Degustaba libremente del café matutino, cuando sonó mi celular ¡Sabia que pasaría! El número registrado era el de Tyler


-¡Buenos días! –Dije pasivamente al emisor-
-hola Bill –Contesto- ¿Sigues en el hospital?
-sí, así es mmm ¿Y qué hay?
-Hoooo bueno lo de siempre, un crimen pasional en un hogar promedio –Dijo sin mucha importancia-
-¡Ho vaya! y ¿Ha dicho Girola algo sobre mí?
-no, la verdad no, incluso me dijo que acompañara a Terrance, él es el detective y alguien tiene que tomar los apuntes
-heee –Medio emití una risita- ¡Lo siento!
-descuida –Replico patéticamente- ya lo he hecho antes ¡Oye! ¿Cómo está Mischa?
-no lo sé –Respondí llevándome la mano al cuello- aunque no es nada extremadamente grave, anoche no me permitieron pasar a verla pero creo que en unas horas ya podre hacerlo
-uffff entonces suerte, le va llevar tiempo olvidar lo que paso ¿Te digo algo? Ayer fue uno de los días más extremos que he vivido en el trabajo sin tomar en cuenta aquellas dos veces que ambos fuimos secuestrados, lo bueno es que no tenemos residuos de trauma o cosas así, creo que eso se aprende en el trabajo, y en el día a día en aquella academia policial.
Al escuchar esas palabras no pude evitar solar una sonrisa penosa y virar los ojos para responder: Claro “La academia policial”
-entonces, saluda a Mischa de mi parte, por cierto si te apareces por aquí me llamas
-tenlo por seguro
-bien héroe, nos vemos luego
-seguro, adiós


Guarde el celular en el bolsillo de la chaqueta y seguí bebiendo mi café, no fue mi imaginación pero juro que escuche la voz de un hombre decir “Bill” Aunque no supe de provino me moví un poco del asiento y mire a mi alrededor con la tasa en la boca, pero no había nadie con plan de hablarme. Termine el café, deje las monedas en la mesa y salí de inmediato, nuevamente me encontraba caminando por el jardín, era tan azul y puro que se me antojo cortar una flor, roce la mano por cada una, otras era más delicada y el solo hacer contacto con los dedos las hacia caer desboronadas, pero me di tiempo para ser un experto en botánica y aproveche a tomar la más grande y sana, sin embargo mi ignorancia de percatarme si la belleza hería lo pase por alto, entonces al presionar mis dedos dos malditas espinas se incrustaron en ellos, me fue imposible esconder el rostro de dolor momentáneo, las grietas en mi piel eran profundas y me rebosaba la sangre. Mi típica reacción fue llevármelos a la boca. Con más cuidado terminar de cortar la flor para seguir el caminando.
El dolor de las cortadas era insoportable así que fui a mi auto por dos banditas, abrí el baúl y el cofre de herramientas, allí estaban, me tape los dedos y volví a cerrar de forma brusca al tirar la tapa, un hombre estaba a mi lado derecho, me impresiono verlo parado tan molesto, ni siquiera lo conocía, pero a juzgar por su bata blanca supongo que era un doctor.


-mmm ¿Si? –Pregunte mirando confundido a ese tipo-
-es tuyo este auto –Dijo molesto-
-si lo abro, es porque es mío –respondí con tono sarcástico-
-escucha este es mi lugar de estacionamiento –Exclamo molesto mientras me apuntaba con el dedo. Creo que el tipo no estaban bien de la cabeza por la forma en la que me hablo-
-oiga no me puede hablar así, este estacionamiento es para pacientes y creo que usted es un doctor ¿No?
-cuando no hay lugar en el parqueo de los trabajadores, debo dejarlo aquí y estas ocupando mi lugar, idiota
-¿Qué? Espere, escuche no se dé que me está hablando pero no lo haga más y menos en ese tono –Le pedí al hombre en el que ya dudaba seriamente que fuera un doctor-
-¿Que no lo haga en que tono? –Dijo burlándose- ¿Qué te diga idiota? Oye te has robado mi lugar. ¿Pero sabes qué? tómalo, es tuyo, puedes quedártelo siempre. Es el lugar del idiota, es tuyo ¡Nos vemos idiota! –Dijo, se dio la vuelta y comenzó a caminar hacia la salida-


No le dije nada mientras se marchaba, pero que me haya llamado idiota me enojo y ya saben que no es bueno enojar al príncipe, además me sangraban los dedos. Volví a abrir el baúl y saque un navaja, me la guarde en el pantalón y me fui por el mismo camino que había tomado el doctor, llevaba la flor en una mano y la otra la mantenía apuñada. Vi que el extraño tipo subió unas gradas, viro en un pasillo, abrió la puerta de un consultorio y entro.
“Fantástico” me dije a mi mismo, observe a los lados para prevenir que no hubiera nadie, toque la puerta del consultorio, la voz desde adentro me dijo “Entre”
Entonces lo hice, lo primero en leer fue su placa sobre el escritorio decía “Dr. Psiquiatra Baldar” el hombre levanto los ojos y grito.


-¿Tu? ¡Vaya! No te atenderé lárgate I-D-I-O-T-A –Exclamo como deletreando la ofensa-
-no quiero que me atienda I-D-I-O-T-A –Le respondí con la misma palabra mientras caminaba a él-
-¡Vete! –Dijo cuando se puso de pie y con los puños cerrados golpeo la mesa-
-está bien –Me detuve, al otro lado del escritorio- Esta bien, me iré pero antes are una cosa….


Cuando el doctor escucho esas palabras y claramente noto la sonrisa nada agradable pintada en mis labios dio un paso atrás, entonces saque la navaja. El hombre se quedo paralizado al ver mis intenciones con el maravilloso artefacto, ya que no reacciono más que una mirada profunda recargada de miedo.


-le dije que se calamara y no quiso, me corte los dedos, salió sangre, me sentía con necesidad de ver más, pero no precisamente la mía, pensé que era el hospital y debía aguantar el impulso y apareció briboneando, entonces soltó la cadena de la bestia ¡La soltó doc! –Le dije llevando la flor un en la mano y la navaja en la otra-


Pude haber esperado que el doctor reaccionara de forma violentan ya que me hablo tan fuerte, pero no hizo nada más que quedarse pegado a la pared mientras parecía estar en un estilo de trance, sin embargo no era nada de eso, era solamente que el miedo que lo dejo paralizado.
¡Lastimosamente para todos los inocentes cuando el príncipe comienza algo es porque lo terminara! Así que sin importarme los nervios de aquel hombre, le corte el cuello con cuidado para que no me salpicara la sangre ¡Mi deleite siempre es el sufrimiento de las victimas! Pero hoy un día en el que no me sentía muy excitado, el médico Baldar tuvo suerte ya que le ofrecí una muerte rápida.
¡La sangre y carne es tan dulce! En especial la sangre, no podía limitarme a lamer el cuchillo como siempre.
-Nos vemos I-D-I-O-T-A – Dije a su cadáver, arranque las cortinas de la pared para tapar el cuerpo, asome la cabeza por la venta y salí. Llegue a la sala de espera tome asiento, me estaba mordiendo los dedos cuando llego una enfermera y dijo que podía pasar a ver a Mischa también me informo que mi dama, estaba mejor, solo tenía golpes que con el tiempo se irían curando. Le agradecí por el dato y entre. Cuando me vio sus labios se estiraron con una ilusión asombrosa.


-hola señorita –Le dije con tal dulzura-
-hola –respondió casi llorando-
-¿Cómo te sientes? –Le pregunte y me agache frente la cama-
-un poco mejor
-te traje esto –agregue y le di la flor causante de mis heridas y a la misma vez también causante de mi temprana excitación y muerte de una persona. Ella me miro, sonrió y la tomo-
-¡Gracias! Es muy hermosa
-como tú
-Bill –Exclamo y se mordió la lengua- Yo, yo no sé como agradecerte por todo esto…. –Decía cuando se vio interrumpida por mi-
-Mischa esto…. –replique-
-no Bill escucha –suplico. Me llamo la atención entonces me calle y le di la pauta para hablar.
-está bien –dije- ¿Sí?
-no sé como agradecerte por todo, desde el primer día que te conocí me has salvado constantemente de mi mala suerte, aunque jamás había sentido la muerte tan cerca como ayer, eres la persona más buena del mundo y yo tengo suerte de tenerte –agrego entre cortada, mientras que los ojos se le llenaban de lagrimas, posaba su mano en mi mejía pero trataba de ocultar el débil sentimiento levantando las cejas y mirando de reojo a otro lado, sin embargo era imposible disimularlo.


Mientras que yo, no pude tener más gesto que bajar la mirada y pensar ¿Cómo ella puede pensar que yo soy un héroe? ¿Cómo puede decir que soy la persona más buena? Me siento un narcotraficante caritativo. Ella nada mas mira lo que mis ojos le dibujan. Sin embargo existe algo que realmente no finjo y es protegerla, salvarla con sinceridad siento el deber desde muy remotamente dentro de mí y estoy consciente que el hecho de aparentar ser humano no espuma el moustro que me habita.
Mi disfraz de halloween permanente es de policía, la actitud cineasta consta en atrapar chicos malos, resolver misteriosos crímenes y hacer cumplir una ley marcada como constitución. Ja, pero no me hace bueno el deber al contrario solo me hace un mejor mentiroso. Y ahora al tener a Mischa en el hospital, después de casi haber sentido la bala traspasar su cráneo logro comprender lo hipócrita que soy ¡Vaya y no solo yo! Todos son de la misma forma, somos hipócritas porque no importando quien sea el del sufrimiento decimos sentirlo cuando realmente las palabras son más fáciles que el viento. Jamás se puede comprender la pena de los otros sin antes haberla experimentado; y hoy un moustro 95% aparentemente insensible lo entiende. Nunca he querido a nadie y lo sé. Para mi ¿Lastima y compasión que es eso? ¡Por favor! Sencillamente es un invento social para manejar mejor el entorno, algunas veces he dicho “Lo siento” aunque mi boca y mí… Mí adentro está más seco que el Sahara, pero en las últimas doce horas he sentido una aflicción extraordinaria que me hizo despertar la semilla de comprensión, no por completo pero es una experiencia única ¡No agradable pero lo es! Y confieso que estoy considerando seriamente decirle que la quiero, porque tal vez lo siento, nunca pensé que fuera así, me atasque en la idea de una seguridad quizás segura “conmigo no le irá bien” y a todas las manipulaciones artificiales de Christina es ridículo que con dos palabras le haya creído a ser muerto ¡Ridículo pero cierto! Porque la veo, la siento parte de mi, su voz provoca que me electrifique y transite por la vereda de su eco siguiendo sus palabras como un reloj hipnotizarte a mi cerebro.
Sin embargo aceptando tantas cosas no puedo dejar de lado una verdad que jamás cambiara y es el maldito deseo por la sangre, por la carne, yo necesito eso para poder vivir. Algunos necesitan aire, agua, amor como lo principal. Pero yo necesito torturar, no puedo evitarlo, el sufrimiento penetrado en el rostro de los inocentes es el beber agua fría luego de una larga caminata, ese mismo sadismo me eufóriza el cuerpo y me lleva a comerme a las victimas ¿Tétrico no? Si alguien de estas personas descubriera mi vida real supongo qué pensarían.
“¿Hey como el chico policía del BMW puede ser un maldito caníbal? Luce tan normal” “Deberíamos matarlo como a los moustros de cuentos fantásticos” “Hooo claro o como a las brujas en el siglo….” “No mejor deberíamos hacerle mismo que hace a sus víctimas” “Ha claro buena idea”
¿Y saben qué? Sería justo pero no ocurrirá.


-Hooo Mischa no es nada –respondí sosteniendo las palabras que casi soltaba mi boca ese bajo e inseguro “Lo hago porque te quiero”- eres mi novia y es mi deber hacerlo, no quiero que te ocurra nada. Aunque para serte sincero quien me ayudo demasiado fue el detective Parker
-¿Quién es, él?
-es un estadounidense que llego ayer ¿No lo has visto?
-no, para nada
-bueno, veras, es un detective llamado Terrance Parker y tiene un don especial, de no haber sido por su clarividencia se me hubiera hecho más difícil encontrarte. En verdad le debo una
-¡Le debemos! –corrigió sonriente-
-por supuesto –Conteste y bese tiernamente su frente-
-Bill ¿Te han dicho si podre irme este día? ¡Realmente odio esta cama!
-claro, por la tarde nos podemos ir
-uffff que bueno porque siempre he detestado los hospitales
-te entiendo, pero escucha, esto haremos, primero iremos a la farmacia por una crema para las cicatrices de golpes y luego a… -Estaba a punto de decir “A mi apartamento” de no haberme interrumpido-
-¡A mi apartamento! –Introdujo de inmediato. La mire y suspire- como digas. A tu apartamento
-gracias, es que se hizo un tiradero increíble, ni siquiera pude terminar el informe
-no te preocupes el informe lo terminaría la secretaria del comandante Kendall y recogí tus papeles
-Hay Bill ¿Enserio? –Pregunto con su rostro más apenado-
-sí, los policías tuvieron que ir a tomar datos del lugar donde el maldito te secuestro, y fui con ellos, tomaron lo que necesitaban y se largaron. Después levante los papeles y aquí estoy
-¡Gracias!
-no fue nada –Le dije sonriendo y llego la hora de provocar recuerdos incómodos pero necesarios- Mischa ¡Escucha! Necesito que me cuentes como fue todo, desde el inicio. Perdóname por hacerte recordar ese calvario pero es la segunda vez que te ocurre algo similar y como persona justiciera <<Jajajaja no me hagas reír príncipe>> Y tu novio debo asegurarme que no tengas traumas psicológicos –Exclame tomándole de la mano, y bajo un segundo ella se quedo en silencio, pero acepto relatar el infierno que vivió-
-está bien, pero la verdad ¡Nunca he ex pimentando síntomas de trauma! No siento nada al recordar después de unos días
-perfecto preciosa, pero quiero que me digas de todas formas –Mischa volvió a pensarlo, apretó sus labios y movió la cabeza soltando de su boca una resignada respuesta- lo hare, te voy a contar.

Fue largo su relato, desde el instante que en aquella ocasión el deje en el apartamento, hasta la llegada del rescate, me relato exactamente lo que Terrance ante sus ojos vio, a diferencia que Mischa lo hizo con más detalles.

Capitulo 24 (84) 3era Temporada

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Ellos dos iniciaron una sofocada conversación, mientras que a mí me fue imposible prestarles atención porque estaba indagando en mi propia cabeza ¿Cómo pude ser tan estúpido? y ¿Cómo es que he llegado a preocuparme por alguien? Si ni siquiera lo hacía por mí mismo. También me torturaba imaginando que la mataba, veía las imágenes ante mis ojos, me frustraban y me confortaba sab...iendo que de cualquier manera las pálidas manos que me acompañaban rodearían su cuello en algún momento, porque su muerte ya está escrita y NO en el libro de los inocentes. Las alucinaciones que se habían alojado en una parte de mi cerebro sobre la probable muerte de Mischa me provocaban mover la cabeza involuntariamente, Terrance se percato de eso.


- ¿Te sientes bien?
-no, no, no me siento bien, mi novia esta secuestra y es menos de una hora es probable que la maten, no puedo estar bien
-Bill, ten fe –incorporo Tyler acompañado de una minuciosa intención de aliento- ya estamos por llegar. Ella estará bien


Por cierto ¿Qué es eso de fe? ¡Si vivo de fe! Es muy probable que en dos días ya esté muerto. Pero así como lo plantea mi colega.
¡Es debido tener fe solo cuando estas de la mano con ella de lo contrario no esperes que con una “Fe” haragana el manzano de naranjos! La palabra no es la acción la palabra es la espera de una acción.


-te juro que si la toca, no sé hasta qué punto de tomarme esto personal llegare –Dije y cerré la boca unos segundos- ¿Terrance?
-¿Si?
-¿Podrías contarme todo lo que viste?
-seguro –exclamo y carraspeo- bien, cuando me diste el celular escuche de nuevo la voz de Paul el asesino del gato negro…
-por fin –interrumpió Tyler- Ho lo siento sigue
-provoco en mi una visión lateral, fue tan clara, nunca había tenido una semejante, una película a cámara ligera se compenetro en mi cabeza.
El asesino ya hacia acostado en su cama, de pronto se corbo pero se quedó sentado todavía, tenía los ojos rojos, creo que había bebido la noche anterior, después note a un gato entrar por la puerta, era negro ¡Por Dios! Paul por fin se puso de pie, tomo el animal y salió al patio, le comprimió el pelaje y comenzó a asfixiarlo con ambas manos. Luego vi aparecer a una mujer, creo que era su esposa, usaba una bata blanca y traía una jaula en la mano, supongo que era veterinaria le dijo algo como “Suelta a ese animal” Paul la ignoro y se fue con el pobre gato hacia un sótano bajo tierra, ella, ella lo siguió, le estaba gritando “Suelta ese gato Paul, suéltalo” Pero Paul la seguía ignorando. Ella enfado al demente, que poco le importaban las palabras de quien lo rodeara, había una hacha en el muro, la cual en un abrir y cerrar de ojos estaco en el cuello del pobre gato, pero evidentemente su esposa lo jalo del brazo y fue entonces ahí donde Paul le enterró el hacha en el cráneo a su propia mujer. Luego lo mire llorar y llorar por todos lados. Escondió el cuerpo de ella dentro de la pared de su habitación.
Hooo Paul había leído muchas historias de Edgar Allan Poe –Dijo mirándome- Estaba traumado con ellas.
-¿Y luego? –Pregunto Tyler con mucho interés, como si Terrance se estuviera inventando un cuento y nos no lo estuviera narrando al mismo instante-
-luego, amo eso, amo el asesinar, volvió al sótano, afilo más la misma hacha incluso hizo unas prácticas de cómo incrustarla mejor. Estaba escribiendo algo ¡No se que era! Pero salió a matar. Hasta ahí mi visión se detuvo y vi solo sombras, luego volvió y Paul estaba tocando la puerta de una chica, ella poseía una gran sonrisa, el sujeto vivía enfrente de ella. Lo cual es extraño creo que se mudo. La mujer creyó que no tenia porque desconfiar sin embargo el asesino solo hizo contacto visual con ella, eso la aterro e intento cerrar la puerta pero fue imposible, el sujeto coloco el pie, ella retrocedió dejándole el paso abierto. Dentro de la vivienda tenía papeles muchos papeles encima del sofá y una laptop en la mesa. Paul le dio con el puño en la cara se podría decir que la noqueo y la cargo hasta un auto la sentó a su lado, paso por ese letrero que decía “Schering” también cerca de un lago, la bajo en brazos y entro al cuarto donde la tiene presa, estaba sentada en una silla de madera, amarrada y hasta ahí termino todo, ella aun seguía inconsciente. Pero está viva. No se mas.
-¡Increíble Terrance! -alago Tyler- ¿Pero cómo es que supiste su nombre?
-porque escuche una voz gritar “Paul”
-solo espero llegar a tiempo –dije mirando fijo-


Nunca había sentido un camino tan largo como el de ahora, jamás había conducido tan afanado ¡Bien, me sentía una bala con armadura! A pesar de que ya doblaba en la calle de tierra, donde estaba bien colocado el letrero dando la bienvenida al pueblo, sentía que aun faltaban horas para acercarnos al lago. Sin embargo ese presentimiento vago solo era una ilusión y llegamos a estacionarnos a la orilla, justamente donde lo hicimos la última vez. Elegimos el punto principal, sin ningún hogar al alrededor, únicamente rodeados por arboles a un minúsculo paso del bosque. Lugar donde típicamente hay muchos de esos cuartos que Terrance describió.
Bajaron con pistola en mano los policías y el teniente, luego nosotros El jefe, Girola, nos señalo por donde debíamos ir e intentamos llamar al gato negro de nuevo, pero el celular estaba apagado. Conmigo vinieron Tayler, Terrance y un oficial mas, el teniente tomo otra ruta junto a los demás. Llevábamos el arma como garfio enganchado a la mano, mirando hacia todos lados y aunque yo ya aparentaba un poco de calma ¡En realidad no era así! Es simple que lo de disfraz se me da a la perfección, este moustro estaba más aterrado que nunca. El crujir de los palitos al ser pisados se oía como una boca comiendo Doritos en un funeral ¿Quién carajos comería Doritos en un funeral? ¡Como sea! A cada paso que se me marcaba en nuestro avance manteniéndonos comunicación con el teniente. Creo, creo que Terrance volvió a tener una de esas extrañas visiones. Se quedo mirando el suelo y reacciono.


-ya sé donde están –replico de pronto-
-¿Dónde? –Pregunte de inmediato- Dime ¿Dónde?
-a doce metros de aquí probablemente, vamos –Grito y fue el primero en salir corriendo, sin pensarlo dos veces fui el segundo en ir tras él, viramos entre árboles, pasando el poso aquel donde hace ya un buen tiempo Tyler y yo encontramos restos humanos. Salimos a un prado exageradamente verde, perfectamente cuadrado, en el fondo detectamos la casa de dos plantas. En realidad era un desastre tan vieja y destruida, Parker nos indico con el dedo que guardáramos silencio y en voz baja dio las instrucciones de rodear el prado entre los árboles. Ellos hacían lo mejor que podían y se miraban entre sí, unos se fueron por la parte trasera de la casa, pero el detective Parker y yo nos asomamos por la puerta, intente abrirla forcejeando pero fue imposible, a Parker se le ocurrió una mejor idea y le disparo a la chapa ¡Fácil solución!


-Bill ve tú por allá –Dijo en voz baja, mientras sostenía el arma con tanta firmeza -
-por supuesto.


Me escabullí de lado izquierdo en la planta baja, camine cerca del baño, le propine una patada a la puerta y esta se rompió, busque entre varios escombros de lata oxidada, pero lo único que me rodeaba era el moho de las paredes. Salí de ahí y seguí caminando, después de no encontrar nada regrese al punto donde empecé. Mire las gradas que llevaban directo a la segunda planta y no dude más en subir. Arriba solo habían dos habitaciones una con puerta y la otra sin ella. Decidí inspeccionar en la que estaba sin puerta, como babosa me pegue a la pared y con salto de impresión me posicione en frente y apunte, pero no había nada más que un viejo bote de pintura usada y la ventana abierta. Enfurecido le di una patada, me volví a jalar el pelo y golpee voluntariamente mi cabeza contra la orilla de la ventana, mis ojos se desviaron al los arboles que desde ahí se veían, y note como un hombre a tal vez doce metros arrastraba a alguien. Supe que era Mischa, inmediatamente grite a los policías que rodeaban la casa que siguieran el camino donde apuntaba mi dedo, pero supongo que no me escuchaban porque tan solo miraban confundidos ¡No entendían!
“¿Qué hablo en chino o qué?” Me dije a mí mismo y salí disparado para tratar de alcanzarlos, sin embargo antes de bajar las gradas el detective llego a mí y sin detenernos me entrego un papel, dijo que se lo encontró en el segundo cuarto junto con la silla y que el también había visto lo mismo que yo en el bosque. El papel tenía el número “35” Escrito con sangre y no reaccione de otro modo más que rompiéndolo.


-¿Qué son sordos o qué? –Dije a los demás agentes mientras pasaba encandilado a su lado- haya van –Señale-


Tayler informo sobre lo visto al teniente. Corrimos atreves y más de esos quince metros, topamos en la orilla del lago, donde no veíamos a nadie, en el punto oriente apareció el teniente. Nos miro y nos pregunto con señas ¿Qué pasaba?
La triste verdad era que después de haber visto al gato negro llevándose a Mischa se había vuelto a perder, el tipo era muy inteligente no era casualidad que jamás lo hayamos capturado después de treintaicinco asesinatos.

Terrance revolvió la vista hacia sus lados y exclamo: Demonios ¡Lo hemos perdido! Pero esta dirección tomo -Afirmo- Tu lo viste Bill ¿Cierto?
-sí, pero su paso era muy avanzado, pudieron haberse escabullido en cualquier lugar. El tiempo se está cavando –Me dije en voz baja y cerré los ojos. Entonces escuche gritos de auxilio proveniente casi desde el punto donde se hallaba el teniente Girola, aparentemente todos los escucharon y corrimos con suave delicadeza. Tres arboles ya pelones escondían exactamente la misión, usamos a estos como pared, a la cuenta de tres daríamos la vuelta y fijaríamos la boca del arma a un mismo punto. Girola diría los números malditos.


- ¡Listos! -Introdujo- Uno, dos, tres.
Soltó e inmediatamente mi dundo rodo, en un microsegundo, donde mi mirada se fundía con mi propia alma rogué que los buscados se encontraran hay… Y ¡Bingo! Varios dedos en el gatillo apunto a Paul, sin embargo cuando parece que la luz estuviera al final del túnel, el camino se torna tétrico. El gato negro también tenía un arma, una que precisamente a quemarropa acariciaba el cabello de mi amada, con la mano derecha le tapaba la boca. Al verla así me sentí tan mal pero al mismo tiempo regocijado. Le rodaban lágrimas de desesperación, sus ojos eran más rojos que el sol en verano, le habían golpeado la cara, la pijama la tenia sucia y rasgada. Maldita imagen repetida del día que la conocí.


-hooo vinieron los polis –mofo el asesino Mirando excitado a Mischa-
-Paul Shamir –grito el teniente- estas arrestado por homicidio y secuestro, suelta a esa mujer, o te dispararemos.
-no, no lo harán porque yo tengo mi arma en su castaña cabecita, así que quien les manda a bajar el arma soy yo. Háganlo o ella pagara las consecuencias
Nadie obedeció al petición de maniático y hubo un silencio incomodo por unos segundos hasta que Tyler hablo.

-no lo haremos hasta que la sueltes –Dijo con tanta seriedad-
-ho, se torna muy difícil su mandato señor policía –respondió de forma sarcástica-
-¿Qué paso con la maldita y anticuada hacha? –Pregunto Terrance, moviendo los labios más rápido que el viaje de una nave espacial, mientras su concentración era más grande-
-es la victima treintaicinco, merece un trato especial ¿No? Por cierto, a ver ¿Quién de ustedes es Bill? ¿Tu? –Exclamo-
-yo soy Bill –Grite, apuntando con mas furia.- ¿Qué quieres?
-pues nada, no quiero nada, tengo una pregunta para ti ¿Has matado a alguien alguna vez? –Formulo- ¡Nunca nadie me había dicho tan cosa! Pero no le respondí y encendí la llama de mis ojos.
-suéltala Paul, te daré lo quieras porque la sueltes –gruñí y mire al teniente- Por favor haga algo, la va matar
-escucha si sueltas a la mujer y te podrás ir. Solo suéltala por favor
-¿Creen que soy idiota? –Grito y cacho el arma, ardiendo en enojo- ¡La voy a matar! ¡La voy a matar! ¿Cómo se atreven a tratar de engañarme con una propuesta tan ridícula? ¿Al caso lo olvidan? Soy más brillante que todos ustedes juntos, incluyendo al psíquico.
-Dijo e hizo queTerrance bajara la mirada, pero no humillado si no apenado-
-amigo ya no importa lo que hagas, te vamos a atrapar, tenemos tu nombre tu rostro y no, no fuiste el mejor asesino ni eres más inteligente. Cometiste un error en llamar, en tocar a esa mujer
-ja! –Emitió con la sonrisa asquerosa- ¿Tanta preocupación por ella? –Pregunto sumergiendo la cabeza de Mischa en el agua-


No evite caminar un poco más, Girola me grito que me detuviera y lo hice porque reacciones y supe que si me acercaba Paul dispararía. El maldito volvió a sonreír mientras acompañado de todo el sadismo disponible, la mano izquierda se le enredo en el cabello de Mischa.


-¿Por qué llegar a treintaicinco? –Añadió Terrance- ¿Por qué llamar cuando tienes la última? ¡Tú mismo te delataste! Y sabes perfecto que iras a la cárcel
-no –emitió moviendo la cabeza- Yo jamás iré a la cárcel
-no, Paul no iras si la sueltas y bajas el arma
-que equivocados están. Y usted–Dijo con dedicatoria al psíquico- Se pregunta ¿Por qué este número? ¡Déjeme contestarle mi querido detective!
Mi dulce esposa contaba con esa edad cuando la mate, hace un tiempo, ninguno de ustedes tiene ni la más remota idea de lo bien que se siente hacerlo, es un gusto que ninguna adicción te puede brindar. Especialmente sí son mujeres como esta –gimió tomando mas fuerte el cabello de Mischa- soy tan bueno en lo que hago, que decidí llamar y burlarme en sus narices, porque si sus ojos me ven ahora jamás tocaran mi piel ¡Me iré! ¡Me iré lejos! –Replico y esta vez apretó mas su boca-


Supongo que en lo de matar y decir lo bien que se siente lo comprendo, porque también es mi delirio, sin embargo hoy no era uno de esos días en los que me da gusto ver una muerte ¡No la de Mischa! Además matar mujeres no es tan divertido, en unas cuantas ocasiones lo he hecho pero falto adrenalina ¡Aun así no discrimino! Un asesino jamás lo hace.


-más patrullas están viniendo –volvió a advertir Girola- y no comprendo tu estúpida idea de huir. Estas rodeado
-mátenme pero ella se muere -Grito y lanzo a la asuntada mujer al agua, estaba a un abrir y cerrar de ojos para penetrar una bala en el cráneo, cuando no pensé, no recordé solo actué, con mi cerebro en blanco hale el gatillo y descargue plomo en Paul, las balas le entraron el pecho y el cuello, en cuestión de segundos cayó derribado. Todo este drama había ocurrido a velocidad luz, no sabría explicar la acción porque no existen las palabras para tal momento.


¡Por Dios mate a una persona frente a todos!, grito mi subconsciente y Me quede impactado bajo un segundo para volver a reaccionar, los policías simplemente corrieron auxiliar a Mischa, tras ellos fui yo, los sobre pase y tome a mi novia, estaba mojada, llorando como si fuera el fin del mundo, machada de su sangre mientras que la de Paul se mesclaba con el agua. Mischa se sujeto con las grande fuerza de mi cuerpo, jamás un calor tan fuerte había recorrido mi ser, ni nunca antes pude escuchar el corazón de otro ser más acelerado ¡La estrella había estallado!
Unas patrullas y ambulancia aparecieron segundos después. Sacaron el cuerpo del asesino del lago, lo subieron a una camilla y lo taparon con una manta blanca, a Mischa se la llevo una ambulancia, estaba muy golpeada aunque estable.
El teniente me llamo. Ese era un momento donde todo frente a mi ocurría en cámara lenta. Acompañado de un voraz suspiro conté los pasos hasta el.


-buen trabajo –Dijo, sonriendo, tal gento y palabras me alentaron- Lo hiciste bien, entramos al punto en el que fue necesario y no te preocupes haremos que quedes libre de cargos.
-hooo, no sé que decir sobre lo que hice, pero comprenda, de no haberle disparado habría matado a una persona inocente
-descuida, lo sé, fuiste el primero en reaccionar evidentemente, lo hiciste bien, acabaste con la pesadilla de Alemania. Chico ve con ella
- está bien –concluí-
-oye espera –grito desde atrás mientras detenía mi paso-
-¿Si?
-toma el día libre mañana, si se presenta algún percance, te lo hare saber
-gracias –replique con el eco del final melancólico que se vivía-


Mmm no sé cómo llamarle a esto ¿Ironía de la vida? Un asesino mata a otro asesino, pero de no haberlo hecho ella ya estaría muerta, es como la parte de la película cuando el moustro salva a la princesa sin embargo por el hecho de hacerlo no deja de ser moustro. Tal vez ese moustro cree que es lo único que tiene, tal vez ese moustro está confundido, después de tanto tiempo odiando gente y matando solo porque siente el deseo, hizo algo que va contra las leyes de su naturaleza. Algo no fingido. Algo que evidentemente deja una tristeza en el aire.

Bueno Aliens una disculpa por parte de las dos Christinas, la verdad si encerio, perdonen por a mi no haber subido los caps, no tenia tiempo y al igual que Tamil, espero que les guste... ¡proximamente 4ta temporada!

Capitulo 23 (83) 3era Temporada

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Al día siguiente, bueno mejor dicho horas más tarde, me preparaba para volver al trabajo ¡Muy listo y con todos los ánimos del día! Cocine mi propio desayuno, un poco de café y panqueques. Antes de marchame, me di el tiempo de ver como Apep se devoraba dos ratones, luego abrí la puerta, la azote y baje. El trafico estaba normal, no muy ni poco fluido. Mmm la mañana se plantea...ba más tranquila que nunca, cielo nublado y clima cálido ¡Demasiado inusual para mi gusto! Cuando llegue al trabajo, las personas se cruzaban frente a mí, así como en una película a cámara lenta, teléfonos sonaban y varias voces se escuchan todas hablando al mismo tiempo. Durante el camino a la oficina me tope con la agente Darla me pregunto ¿Qué había del asesino del gato negro? Nada más le comente un poco de los últimos sucesos investigados y seguí la ruta, para mi sorpresa Tyler ya estaba en la oficina, sin saludo ni nada por el estilo lo primero que su boca soltó fue ¿Y Mischa? No sabía de que hablaba, ella se suponía tenía que estar desde hace rato aquí como siempre.


-¿Qué? ¿No ha venido? –Pregunte y entre-
-¡No! Por mi parte creí que vendría contigo
- no, no anoche la deje en su apartamento. Me dijo que tenía que terminar unos informes para entregar hoy a primera hora ¡Que extraño que aun no haya venido!
-el teniente Girola está molesto, por precisamente esos papeles
-haber le llamare

Marque su número pero el celular me mandaba al buzón de voz, insistí por lómenos cinco vez y fue en vano. ¡Hora tardía! Marcaba el reloj, mi ser se extremesio y un poco de preocupación llego, volví entonces a llamar a casa pero la única voz que me atendió fue de la contestadora.
“Hola soy Mischa, deja tu mensaje después del tono”

-¿Y bien? –Pregunto Tyler sentado en la silla del escritorio-
-no contesta
-vuelve a llamar al celular, que está muy atrasada

Y volví a intentarlo pero ¡Nada! Mischa no atendía. Sin lugar a duda la preocupación ya se había apoderado de mí y mi cabeza nadaba en preguntas ¿Dónde está? ¿Le abra pasado algo? Realmente me estaba angustiando.

-vive en Sobieski –recordé- no me quedare aquí, debo de ir a buscarla –Dije impresionado y salí. Tyler grito algo pero no lo escuche, sin embargo al dar tan solo tres pasos se me coloco enfrente el teniente Girola y me grito también; estaba enfadado.


-¡Kravitz! –Exalto- ¿Has visto a Holzman?
-no señor, no tengo idea de donde este
-se suponía que ya debía estar aquí con los documentos
-oiga, llame a su celular pero no contesta, tampoco contesta el teléfono
-creí que vivía contigo ¿Es tu novia aun? ¿No?
-sí, pero no vivimos juntos, ella sigue viviendo en Sobieski
-¿En Sobieski? –Volvió a exaltarse-Le recomendé que se mudara –Dijo mirando a los lados-
-¿Lo hizo?
-por supuesto, es zona de riesgo. En ese barrio ya no quedan muchas tías, hombre –Dijo con su acento español y por algún motivo seguía mirando a los lados-
-debo volver a llamarle
Añadí y me hice a un lado, lo intente de nuevo pero seguía sin contestar, recibí tantas veces a la operadora que estaba por lanzar el teléfono al piso. Me golpee la frente con la mano y vire medio la cabeza para darme cuenta que Terrance estaba a mi derecha. Ese tipo era un espanto viviente.


-buenos días –saludo frunciendo la entre ceja-
-buenos días –Le conteste con poca importancia y me hice a un lado pero él me siguió-
-¡Bill! –Emitió, por lo cual me provoco girar la cabeza- ¿Así te llamas verdad?
-sí, escucha ahorita no tengo ni idea del asesino del gato negro, disculpa se que eres mi superior pero realmente tengo un problema. Debo hacer llamadas, así que si me permites –replique mostrando el celular- te lo agradecería-
-¿Pasa algo? -Pregunto con los ojos posados en mí-
- la secretaria del teniente Girola aun no se ha presentado, es alguien importante para mí, vive en la zona prohibida, y como todos los días ya debía estar aquí
-¡Y es tu novia! –Dijo muy seguro-
Esas palabras me provocaron un suspiro con la contestación inmediata- si, vive en el barrio de los asesinatos, y algo dentro de mi me grita que no está bien –dije mientras me quede pensado bajo un momento, solo se me cruzaba el nombre Terrance, Terrance. Mis ojos se abrieron y roge por algo que normalmente paso por alto- ¡Por favor! ¿Podrías ayudarme? –Dije derrochando la preocupación-
-hooo, pero Bill, tal vez solo está atrapada en el tráfico, o perdió su celular
-no Terrance – afirme con los ojos bien penetrados en los suyos- hablamos de barrio Sobieski

Ese detective bajo la mirada, mientras probablemente pensaba en darme esa respuesta- yo, creo, creo que deberías considerar lo que te dije
-no –repetí decidido y lleno de alta preocupación- ella debía estar aquí desde hace más de una hora y media
-Hooo –emitió-
-viven en la zona de asesinatos, no contesta su teléfono, ni el celular. Tienes que ayudarme –Volví a pedirle, con esta tercera suplica la con función era más que lógica, de alguna forma estaba empezando a creer que no quería-
-está bien –respondió- hare lo que pueda. Para comenzar préstame el celular
-pero no contesta –Le recordé-
-no importa, préstamelo
Y estaba a punto de dárselo cuando extrañamente sonó, no dude ni dos segundos para llevarlo a mi oreja.
-¿Hola? –Fue lo primero que dije al ver que el número no era ninguno de los que tenía archivado. También escuche que el teniente se acerco y dijo molesto algo como “Despediré a Mischa” pero no le tome importancia.
-¡Hola! ¿Bill? ¿Eres Bill Kravitz? –Pregunto la voz suave de un hombre al otro lado-
-¡Sí! ¿Quién habla?
-Mmmm policía –exclamo cambiando de tono, para volverlo más rudo y burlón- ¿Eres policía no?
-oye ¿Quién eres? ¿Te conozco?
-no, no supongo que no señor Kravitz pero intenta hacerlo, todos hay intentan hacerlo, sin embargo soy más listo.

Ese comentario me permitió girar la cabeza y ver a mí alrededor, estaba rodeado, el detective Parker, mi compañero Tyler. Incluso el comandante Kendall se acercaba y habían dos policías más, ellos solo me miraban con un rostro interesante de: ¿Con quién hablas?
-¿Quién eres? –Pregunte con tono fuerte-
-¿Por qué no lo averigua? Tengo una curiosidad ¿Ya se presento la señorita Holzman al trabajo? –dijo. Y pude prestar perfectamente atención a eso, camine desesperado, me toque el pelo y le grite.
-¿Quién demonios eres? ¿Qué le hiciste a Mischa?
-¿Yo? Hacerle a ¿Quién?
-no te hagas el imbécil –Grite- ¿Quién eres? Carajo
-¿Qué quién soy? Permítame presentarme, soy yo, el que se esmeraron tanto por atrapar ¿Y qué creen? ¡Aquí estoy! Con mi dama treinta idos
-hijo de puta – grite desesperado. No tenía idea de que hacer, uno de los que estaba a mi alrededor indicaba que rastrearan la llamada, el otro se quejaba y Terrance solo me miraba escuchando lo que yo decía.
-así es señor, jamás me atraparon y no lo harán
-tú tienes a Mischa maldito, te voy a buscar, te voy a buscar y te voy a matar –Le dije crujiendo los dientes-
Terrance me dijo que le diera el teléfono, estaba tan furioso qué trate de ignorarlo pero insistió una vez más, no quería hacerlo, sin embargo el comandante me indico que lo hiciera. Y no tuve más remedio que entregárselo, empecé a prestar atención a toda palabra que decía, Tyler me rogaba juicio pero ¿Cómo mierdas se atrevían a pedirme eso? A mi novia la había secuestrado un loco ¡Y ni siquiera sabía si aún seguía con vida! El asesino del gato negro estaba cavando su propia tumba y debí suponerlo con esas señales en el hacha. No sabíamos ahora cual era su plan ¡No sabía qué hacer!


-Bill cálmate –indico Tyler-
-¿Qué me calme? ¿Estás loco? –Le grite mirándolos a todos- No me quedare aquí jugando al policía, me voy
-no, no –Dijo Girola- Deténganlo –Indico a los policías que se me colocaron enfrente- No te puedes ir, cálmate carajo
-¡No vuelva a decirme que me calme! –Perdí la noción porque también le grite al teniente, le crují los dientes y le apunte con el dedo-
-no vuelvas a apuntarme con el dedo –Dijo molesto y pude haberle respondió y armar otro lio de no haber sido por Tyler que me jalo e hizo a un lado
-ya, ya, ya ¿Si? Ya, así no ayudas en nada –Grito-


¡No podía creer lo que sucedía! Mis labios se permitieron escapar un brusco suspiro, me coloque la mano en la frente y empecer a recordar lo último que Mischa dijo la noche anterior “Debo quedarme, tengo trabajo que terminar” Eso me enrojeció los ojos y en una esquina remota de mi corazón cruce la idea fallida, la misión imposible, el sentimiento drenado cuando nací e imagine que la quiero ¡Sí! Creo que estoy queriéndola, aunque en ocasiones lo ignore. En el fondo se lo que siento y también se que todo terminara mal, tal vez no hoy ¡Espero! ni mañana ¡Pero el final será trágico! ¡Qué irónico! Estoy descubierto que los moustros si tienen sentimientos.


-Bill, la buscaremos, pero no armes escándalo - dijo Tyler con tono suave, baje medio la cabeza la volví a posicionar y envié la mirada a Terrance, cual todavía tenía en celular en la oreja-


-¡Ya! escucha, dime cómo te llamas –grito al receptor-
-Édgar Allan Poe –Dijo, eso lo pude escuchar hasta donde estaba yo.
-no imbécil, tu verdadero nombre
-¡Edgar Allan Poe! –Dijo otra vez-
-por favor dime ¿Ella, ella está bien? ¿Qué haces en este momento?
-afilando el cuchillo, es la última en la lista
-¿Formulaste una lista?
-sí, si lo hice. A excepción de que no puse nombres, pero en efecto
-¿Por qué a ella?
-porque es mujer ¿Es una respuesta para ti? ya no quiero hablar contigo, puedes irte al demonio o comunicarme de nuevo con el policía
-te llamas ¿Paul Utman verdad?
-¿Qué? –Exclamo asombrado- No, no. Aquí termina esta conversación

Dijo y corto, lo note en el rostro de Terrance.


-¿Rastrearon la llamada? –Pregunto de inmediato el detective-
-en eso estamos, no es nada fácil –respondió un policía-
-Bill –exclamo mientras se acercaba- Bill ¿Tienes una foto de ella?
-no, no tengo nada de ella. -Exclame y sin más… El celular volvió a sonar, pero esta ocasión Terrance me lo entrego.


-escúchame, si le haces algo a ella, te voy a buscar, te voy a buscar y te voy a matar –Exclame sin percatarme de las palabras-
-hooo ¡No me haga reír! Es una lástima su ilusión, el problema es que nadie hay puede hacer nada bien… Mischa Holzman es la última, y como toda buena leyenda a punto de partir debo divertirme un poco más. No lo interrumpa señor agente ¡Por favor! ¿Sí?

¿Divertirse? Eso sonaba como yo.


-¿Qué quieres? ¿Quieres algo? Podríamos llegar a un acuerdo
-no me puede dar lo que quiero. No negociaré placer. Parezco ermitaño, había pasado ya mucho tiempo de no hablar con nadie que no fueran esas preciosas mujeres, tanto tiempo de no hacer las cosas bien ¡Y vaya que sorpresa! ¡Lo estoy haciendo ahora! –Gruño- ¿Quiere que le cuente de que forma la mate? No se lo querrá perder, fue tan deleitante.
-¿Mataste? –Pregunte rendido, al soltarlo eso de mis labios todos se me quedaron mirando y me deje caer sentado, baje la mano con la que sostenía el teléfono y el oportuno de Terrance me lo quito. Sin perder segundos lo posiciono en su oreja. Pero en aquel hombre que solo quería ayudar sucedió algo extraño que a pesar de mi impacto no pude ignorar, y fue cuando el artefacto toco su piel. Parker se estremeció, inhalado con fuerza, sobre salto los ojos por más de cuatro segundos, exhalo, se doblo y dejo caer el celular, entonces me levante asustado y lo recogí pero el tipo ya había colgado. Cuando los demás vieron a Terrance en ese estado trataron de ayudarle, yo me veía en una posición imposible de hacerlo, mi impacto podía más que la razón.
Me sentía tan mal, tan decepcionado, rendido, desgraciado. Habían matado a mi novia, tantos intentos de protegerla del asesino de gato negro y quien al fin y al cabo termino con ella. Me volví a sentar sin decir nada, coloque la mano en mi frente y cerré los ojos.


-Bill –gimió Parker casi sin poder pronunciar palabras-
Y no le conteste pero repitió mi nombre.
- ¿La chica se llama Mischa?
-si –Dije y abrí los ojos-
-escucha, escúchenme. No está muerta ¡Lo acabo de ver todo! -Revelo, medio abriendo la boca, cargado de susto y parecía poder más le temor que el deseo de hablar. Esa noticia provoco que de inmediato tomara posición frente a él. Sentí alivio y la esperanza que jamás en mi vida había experimentado. La maldad tiene punto débil, solo hay que buscarlo.


-¿Qué? ¿Co, co, como viste eso? ¿Dónde? Pero, dijo que la había matado –Desligue la mirada- ¿Qué viste? ¡Habla!
-no hay tiempo para contarlo todo, solo sé que está en una casa rodeada de agua, el lugar mide tal vez solo cinco metros de ancho y tres de largo. Había un letrero que decía “Schering”
-¡El lago! Están en el lago –Señalo Girola a unos policías-
-¿Qué más? –pregunte-
-no fueron claras las imágenes, está sentada en un silla inconsciente, sin poder mover las extremidades pero aun sigue respirando.

Terrance lo decía como contando un suceso aterrador. Quería saber más, más de lo que vio sin embargo no podía perder tiempo debía hacer algo ya. Así que mire al teniente y le dije que debía irme, su reacción fue paciente.


-no iras solo –respondió- somos la policía nuestro deber es rescatar y atrapar al asesinos ¡Por fin lo tenemos! ¡Ha caído el gato negro! –Exclamo y adicionalmente escuchamos la voz de una señorita tras de mí, ella soltó otra noticia alentadora.
-ya rastreamos la línea, está en Schering –revelo, para complacer mis oídos. Volví mí vista a Terrance y por primera vez en mi vida agradecí a alguien desde lo más profundo de mi- Gracias –Dije con ese tono sincero imposible de un asesino serial, Parker, sonrío y dijo- Vamos


Salimos apresurados de aquel lugar, en el auto me acompaño Tyler y Terrance, el comandante y otros policías iban delante de nosotros a toda velocidad, por medio de la radio escuche al teniente advertir a otras unidades sobre lo ocurrido y para desgracia no había ninguna cerca de allí, Schering quedaba casi fuera de la ciudad, era como un pequeño pueblo y usualmente los que se encargaban de ella era la comisaria. No teníamos de otra que pisa a fondo el acelerador. El detective Parker comenzó a dar su teoría del tiempo de llegada y lo que haría antes de dañar a Mischa.

-se tomara tiempo para jugar con ella –dijo-
-¿A qué te refieres con “Jugar”?
-dijo que tenía tiempo de no divertirse, eso indica que a las demás chicas las mato sin mediar palabras, cuando eligió a la secretaria tenía muchas cosas calculadas y evidentemente a la vez que algo sucede por último tratas de que sea mejor que nunca entonces te das tu tiempo, eso es lo que está haciendo Paul en estos momentos.
-¿Pero a que te refieres cuando dices jugar con ella? ¿La torturara? Demonios esto no puede estar ocurriendo <<”Torturar” Es normalmente lo que yo hago a los inocentes, provocó dolor sin dejar de respirar, eso significa para mí jugar>>
-es muy probable, por eso debemos darnos prisa, el es un enfermo lo cual significa que nos dará tiempo, hablara con ella, le gritara, un millón de relatos saldrán a luz hasta el punto donde Mischa se enfadara y eso le hará excitarse para por fin comenzar.
-Wood eres increíble –emitió Tyler alagando a Terrance- Me refiero a ser como eres ¡Que don!
-a veces creo que más bien es una maldición –respondió decepcionado-

Capitulo 22 (82) 3era Temporada

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Dejo de importarme la conferencia, di la vuelta y volví a la oficina, abrí la gaveta del escritorio y tome la mini laptop que guardaba ahí, mientras espera la llegada del teniente trate de indagar un poco en el nombre de “Tom Kaulitz” si así como lo leen ¡Tom Kaulitz! Mi preciado hermanito, ese deseo de saber sobre él me nació de la nada y pase un buen rato leyendo sobre su “...Nueva” Vida, mmm modelo masculino, viviendo en los Ángeles estados unidos, tenía un contrato con una empresa de perfumes por más de ocho millones de dólares. Parecía ser feliz, no hablaba nada de que tuviera novia, pero claro mi hermano jamás conserva una novia, para eso tiene zorras. Las fotos que pintaban su sonrisa me hervían la sangre, el podía ser feliz, no, no el debía estar muerto, debía estar bajo tierra. Una vez no pude matarlo pero volveré, volveré a intentarlo otra vez. No ahora ¿Por qué? Porque quiero vivir una vida pero un día iré por ti hermanito.
Mi dedo deslizaba el mause y muchas fotos mas se abrían, en una de ellas la información era “Tom Kaulitz y su novia” La fotografía tenía dificultades para revelarse, hasta cierto punto mi interés por saber era grande debido a que como dije anteriormente el no es capaz de conservar una novia, sin embargo lucia como misión imposible y me vi distraído prontamente por un golpe en la puerta lo cual me provoca cerrar en un santiamén la laptop. Camine a abrir y Mischa había sido la causante del espanto.


-hola aguapo ¿Nos vamos? –Dijo con una enorme sonrisa, la misma que siempre le caracterizaba-
-hola, por supuesto, solo permíteme llevarle el informe al teniente
-apresúrate –respondió-



Antes de llegar a la oficina me lo encontré y aproveche para entregarlo personalmente. Cuando volví por Mischa con ella estaba Tayler y ¡Vaya! recordé que le dije que iría a su casa ahora. Me acerque un poco apenado para completar el trió Tayler se me quedo viendo con cara de ¿Y?


-heeeem –Emití sin saber que decir-
-iras a mi casa ¿O no? –Dijo-
-haaaa –Volví a emitir y mire a Mischa ella también me dedico otra mirada- Le prometí a ella que la llevaría a casa –excuse-
-no, no, Mischa también puedes venir –agrego- seria agradable que conocieran a Megan, se llevaran muy bien, no pueden negarse Bill ¡Por favor! Yo ya hable con ella y está preparando una cena especial
-¿Quieres ir? –Pregunte a mi bella dama-
-claro, no es cortes dejar a las personas plantadas
Sus palabras me provocar torcer la boca y al fin y al cabo responder con un: Vámonos
-entonces en tu auto Bill –exclamo Tyler-
-no tenias que decirlo –Dije riendo-
-pues debía hacerlo señor, ese BMW debe lucirse mas
-con migo es suficiente… -Respondí-


Jajaja esas risas se dieron en el auto y ni hablar de la cena con la novia de Tyler, era una muchacha, menuda, blanca, de cabello negro y ojos verdes, usaba un vestido de tirantes que le llegaba bajo la rodilla y zapatillas blancas, tenía un carácter Ufff idéntico al de su novio sin duda eran el uno para el otro, vivían en una casa de dos plantas a esquina de calle. Ella había tendido una mesa espectacular y se relaciono a la perfección con Mischa, conmigo fue muy amable. Tenían un gato, ¡Ho si! Era un angora negro con parches blancos, mientras cenábamos y charlábamos el animal se me pasaba entre los pies ronroneando, hubo un instante en el que se me subió a las piernas entonces le presente una mirada de esas que les hago a mis inocentes y el animal me miro, se encrespo, salto y se fue corriendo. Tyler grito “Haaa que maldito gato es un fastidioso animalejo nunca debimos haberlo recogido” Su novia le contesto “Es un animal, siente compasión, Tyler tiene alma igual que tu” Yo baje la cabeza y me metí el tenedor a la boca, después de esa pequeña ocurrencia todo siguió su orden, la cena duro más de lo que esperaba, nos hubiese encantado quedarnos más con ellos pero el trabajo madrugador aguardaba.


-fue un placer conocerlos –Replico Megan-
-lo mismo digo –Dijo Mischa con su sonrisa más encantadora-
-gracias por la cena fue fantástica –exclame- Tyler lamento haber dudado de ti
-hooo descuida, a veces suelo ser muy reservado
-entonces nos vamos, gracias Megan –Concluí-
-de nada Bill, fue un gusto tenerlos aquí -Dijo-


No demoramos mas para subir al vehículo, desde donde Mischa se despidió una vez más moviendo la mano, en el camino me pidió algo que debido a la situación no me parecía buena idea pero había prometido no tratarla como a una niña. Me dijo que la dejara en su apartamento, que esta noche le tocaba desvelo trabajando en unos importante documentos para enviar a Berlín, no me ofrecí a quedarme en el Germany center porque sería una desconcentración y fue lo mejor, así tenía toda la fresca noche para salir a cazar, en realidad ya me estaba desesperando por la sangre. Así que pase a dejarla, nos despedimos con el usual beso y me lance a la oscuridad, había terminado el día, y mis garras estaban más fuertes que nunca, los guantes, cuchillos, y líquido letal en el cofre de herramientas eran una excitación.
¡El lobo va por el cordero! ¿Quién será el cordero del príncipe esta noche? Tal vez ¿Una mujer un hombre?
Conduje casi por una hora hasta llegar a un restaurante, antes de bajar me coloque unos lentes, prepare al encantador Bill y entre. Mire por todos lados pero no había nadie solo, a excepción de una mujer sentada en la mesa de la esquina ¡Supongo que ya tenía mi presa! Con toda la elegancia del mundo me acerque, antes pregunte si podía sentarme, la muchacha no dudo ni un segundo en decir “Si” Me di la tarea de establecer una plática con ella, dijo que se llamaba Josephine y estaba esperando a su novio, eso no me simpatizo en lo más mínimo, me di por vencido. Ella no era mi presa y salí con la idea plateada de ir a otro lugar, sin embargo al empujar la puerta un hombre fornido, de barba y chaqueta de cuero me tiro con el hombro y en lugar de tal vez decir “Lo siento” Dijo otra cosa.


-fíjate al caminar imbécil –Exclamo con su grosa vos de gorila, esa palabras me provocaron crujir los dientes y responder con un leve- ¡Lo siento!
-¿Qué? Púdrete marica
No quise desperdiciar más palabras y camine sonriente al vehículo. ¡Qué suerte! Ya tenía la presa, lo esperaría hasta que saliera.
Los arboles cubrían el estacionamiento, y desde ahí las ventanas se veían perfectamente- Me coloque de mil formas mientras aguardaba; la mano en el mentón, la cara encima del volante, mi espalda bien adherida al asiento incluso me estaba durmiendo, y de no ser por un golpe en la puerta, me habría perdido la noche. Los ojos se me destaparon y mire la ventana, se que suelo sufrir demencia, se que como otros no puedo decir “No estoy loco” pero lo que estaba parado a mi lado izquierda era imposible y aterrador ¡No sé cómo decirlo! Era, era… era Terry cuando la vi me asuste y me moví un poco, estaba colocada ahí con la misma ropa que la conocí, de su boca no salía ni una palabra, apreté los ojos para borrar la ilusión pero no funciono, sí no más bien empeoro, en la otra ventana estaba el psicólogo ¡Althusius! Mirándome de la misma forma. Había llegado el momento donde comprendí de lo que hablaba Christina. Yo no supe qué hacer más que ignorar y observar al frente, quería caer en la verdad, estoy no podía ser real, ellos estaban muertos habían fallecido hace años ¡Yo mate a Althusius e hice que Terry se suicidara!
¡El príncipe no puede evitar matar personas!
Pasaron unos segundos y supuse que ya no estaban, así que vire la cara hacia donde había visto a Terry y no debí haberlo hecho, ella estaba bañada en sangre rebobinando la misma escena de su muerte, cuando medicina legal la llevo y el psicólogo con dos enormes agujeros en los ojos. Me puse las manos en la cara y golpee mi cabeza contra el volante. La voz de esa niña me hizo volverla a levantar.


-se han ido –me grito al odio-
-¿Qué haces aquí? –Pregunte mirándola por retrovisor, en el asiento trasero-
-vine a visarte que debes prepararte para más –murmuro-
-están muertos yo los mate, los mate y lo volvería hacer –dije con los ojos sobre saltados-
- te entiendo –agrego cerca de mi oído otra vez-
Yo estoy para protegerte de los muertos y tú sigue con los vivos. Bill deje de ser tu niña, y comprendo estoy muerta, pero Mischa no es para ti, nadie es para ti, eres mi príncipe ¿Lo olvidas?
-tu tampoco eres real, estas muerta –gruñí nervioso de lo dicho a la chica pelirroja que aun que me negara a creer, para mis ojos era real-
-sí, todos lo estarán un día, y tu hermosa dama, lo estará antes que tú -gimió en forma de susurro a mi oído-
-cállate –demande con los ojos cerrados-
-suerte esta noche -deseo Chris, alejándose entre risas-
Cuando abrí los ojos, ya no la vi. Más vale recalcar que sabía que mi presa se acercaba, el grandulón caminaba de la mano con la misma mujer que quise devorar, al parecer ya estaba apuntada de todas formas en la lista de los inocentes. Les permití subir al auto, mientras les observaba desde el cristal de mi ventana. Los inocentes no tenían planeado moverse ya que comenzaron con besuqueos y esas cosas, entonces decidí aprovechar. Tome el arma, me puse los guantes y baje, les toque la ventana e hice una seña de que la abrieran, el gorila me reconoció porque me mostro su cara más ruda y abrió.


-¿Qué mierdas quieres marica? –volvió a preguntar tan grosero como antes-
-mmm bueno, verán están en lugar público y no pueden follar acá –Solté todo mi atrevimiento-
-¿Qué dijo? –Escandalizo la tipa- Oiga no nos puede hablar así
-ya verá este hijo de puta –Exclamo el hombre y abrió la puerta-


El primer grave erro fue salir, porque mi preciosa arma estaba lista apuntando, cuando el gigante la vio se le bajaron los aires de grandeza y retrocedió, la mujer comenzó a gritar sin embargo no me importo.


-no debiste hablarme así –dije-
-oye ¡Por favor! baja eso –pidió con los ojos bien puestos en ella-
-no debiste hablarme así –Repetí-
-ya lo sé, lo siento
-no hay perdón, da la vuelta
-heeee hombre ¿Qué quieres hacer?
-no puedo estar mucho tiempo aquí, o das la vuelta o me importa una mierda dispararte a la cabeza e irme –grite fuerte apuntándole tan asertivamente-


El tipo se dio la vuelta, entonces fingí que le pondría las esposas pero no fue así, lo que realmente le puse fue el cloroformo en la cara, lo paralizo en segundos y cayó al suelo. La “Señorita” aun seguía gritando y no quiero lucir como un machista pero es en extremo difícil encontrar una mujer que tenga más fuerza que un hombre y déjenme informales que esta no era una de ellas. ¡Soy un hombre malo pero tengo algún lado bueno! No me quedo otra opción que amenazarla con la pistola para que cerrara de una buena vez la boca, lo cual dio resultado, entonces corrió con la misma suerte de su novio, a ella la cargue y metí en la cajuela, al tipo lo arrastre, porque evidentemente era más grande que yo. Regrese a cerrar su auto y volví al BMW.


El hombre malo, decía a los seis años, a los ocho me sentaba bajo el sol con una lupa a quemar hormigas hasta que mamá llegaba y me mandaba a mi cuarto, a los diez me preguntaba ¿Si un niño era capaz de odiar? Porque yo si era y detestaba a mi hermano, a los doce atrapaba ratas en el sótano y les metía agujas por todo el cuerpo, a los dieciocho ya tenía una banda, no era tan famosa y tampoco era feliz, a los veintiuno el niño por fin cometió su primer asesinato, a los veintidós era buscado por la INTERPOLL y a los veinticinco aquí estoy, disfrazado de policía, teniendo amigos, una novia que no merezco y saciando mi instinto psicópata. Soy un asesino por naturaleza. Soy el moustro que esconde un humano.

Lleve a los inocentes hasta el sótano que me correspondía del apartamento, estacione el auto de lado de la puerta y los baje, puse a la mujer sobre un sillón viejo y a su novio sobre la mesa, le enganche bien de las extremidades y permití que reaccionara, siempre les doy el gusto de pronunciar sus últimas palabras.


-bien ¿Tienes algo que decir? –Pregunte buscando entre los objetos con filo del lugar-
-iras al infierno, eres un maldito enfermo
-¿Sabes? Hoy llego un psíquico a mi trabajo y le temo pero no hay razón –Le dije mientras limpiaba uno de los cuchillos que Polly había dejado- Así es el infierno ¡No le temo!
-te quemaras mil veces
-si –Dije sonriendo- ¡Tu también!
-¿Por qué lo haces?
-no puedo evitarlo
-mátame pero déjala ir a ella
- imposible, ya me vio –Moví la lengua entre los dientes- Lo lamento
-déjala ir maldito –Grito-
-cállate –Exclame y puse el filo contra su cuello- Yo también tengo una novia y creo que ¿La quiero? –Crují los dientes- Si algo le pasara no se qué haría
-¿Querer? No sabía que los moustos tuvieran sentimientos
-pues tal vez yo descubra eso –Le dije e hice la primera cortada en su pecho el hombre se quejo y apuño los ojos- Es suficiente ¡Hora de morir!


Mmm comencé a formarle cortadas en sus brazos, las heridas eran profundas y para deleitar mi hostilidad deje caer alcohol sobre ellas, el tipo se estremeció, entonces tome su mano izquierda y le abrí las venas ¡Apuño los dedos de los pies! Luego arranque sus dientes ¡Uno por uno! Estaque más el cuchillo en el hombro izquierdo haciéndolo llegar hasta la madera.
Pasaron unos minutos para por fin penetrar mis pulgares en sus orificios oculares y le saque los ojos, esos deliciosos globos rojos que puse a un lado y seguí con el juego. No soy un asesino que deja morir de una vez ¡Claro que no! Soy como un cáncer que hace sufrir mientras está matando, soy asido que derrite hasta espumarlo todo ¡Soy Bill Kaulitz el mejor disfraz para halloween!
Esa noche así como toda la vida no desarrolle compasión para nadie y exactamente lo mismo que hice al sujeto hice a la mujer, a excepción de que mientras le cortaba las venas pude posar mi boca en su delicada mano imitando aquella película de vampiros. Me deshice de los restos del tipo para enterrarlos cerca del rio. A ella. A ella la guardaría en mi refrigerado justo al lado de Cody.
¿Para qué guardo gente en el frízer? No creo comérmela ¿Ho si? Bueno a lo mejor, la carne humana sabe como cualquier otra.


Salí contento después de la limpieza en el sótano, lógicamente cambien mi ropa. Estaba por tomar el ascensor para subir cuando me tope con el conserje, me saludo y me dio una caja. Al principio me pareció extraño pero recordé que era la comida de Apep dije: “Hooo si es la comida de mi mascota” El hombre me conto que había visto la caja moverse y claro que lo había hecho lo que estaba adentro eran ratas. Al comentarle eso el pobre conserje me miro asustado y se fue lo más rápido que pudo. El resto de la madrugada la pase en la ducha.
 

Capitulo 21 (81) 3era Temporada

 

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Vuelvo a decirlo estoy exagerando con eso de tenle miedo al psíquico, Terrance es una persona normal, no es el ojo de Sauron ¡No!
Por otro lado ¡Me cago en la INTERPOLL! Son una bazofia de de buenos para nada, si mas recuerdo a Bill Kaulitz lo archivaron, con foto, huellas y toda esa bola de inútiles documentos después de haber matado a dos personas y por si fuera poco también... culpado de una muerte de la que no fue precisamente el autor ¡Por supuesto! No era para menos. Y en otros tiempos hubiera pensado que eso no importaba ¡Pobre! Ya estaba condenado, pero no es así. Lo lindo de todo el caos que me rodea es que puedo admirar el trabajo de otros sin dejarme de quejar por la maldita INTERPOLL.
¡Qué más da! Los reproches luego de la tormenta son para los absurdos. Ahora debo hacer mi deber y es hacerle caso al flacucho.
Subimos rápido al auto. Cuando comencé a conducir Tyler inicio una plática sobre asesinos en Alemania ni siquiera le estaba poniendo atención porque una parte de mi cerebro se estableció en mis oídos y parqueo mis sentidos solo para escuchar la voz del fantasma que me murmulla, se percibía como cuando te pones los auriculares en las orejas y el locutor comienza a hablarte lo escuchas tan bien, pues así era como escuchaba yo esa voz, la voz de Christina me decía: “Vamos Bill, matemos a Terrance”
¿Por qué mierdas quería que matara a Terrance?
-“El tiene una actitud muy empalagosa te pondrá en peligro” Dijo. Y desapareció.

Ahora me pregunto ¿Por qué hacerle caso si ni siquiera es parte de mi vida? Y creo que es mejor así, era ella la que me tenia demente, desde que solo ocasionalmente indaga en mi cabeza mi vida ha surgido un poco mejor, quiero decir que me supe controlar, no tirar las cosas, no gritarle a nadie, se que ya paso muchísimo tiempo de eso, pero en ocasiones me llega un recuerdo fugaz.

Los dedos los parecía tener pegados al volante Tyler ya había cerrado la boca jamás escuche la historia de asesinos que conto, estábamos por llegar e íbamos muy tranquilos cuando paso algo extraño que casi hace que el auto gire por los aires, un enorme animal un siervo para ser exactos paso corriendo frente nosotros, pise el freno y creo que hasta Japón se escucho el chillido de las llantas debido al enorme frenazo.

-Bill –Grito Tyler-
-maldito animal –gruñí abriendo molesto la puerta-
-será mejor que revises –advirtió mi compañero cuando ya me encontraba fuera-
-que brillante idea –Conteste sarcástico-
-¿Le paso algo al auto? –Pregunto desde adentro-
-no, ya vámonos –Repuse y di una patada a un neumático-


Volví al vehículo. Fue muy extraño lo de el siervo sin embargo no lo llamaría algo grave, despacio me adapte otra vez, poco después aparecimos en la calle que Parker nos había indicado en el papel, habían casas muy lujosas ahí con buzones que parecían de oro y céspedes más verde que un limón tierno es obvio que la casa que buscábamos era la que tenia policías, Tyler la vio primero estaba en una esquina casi fuera de la calle donde ya se partía en una avenida, bajamos y volvimos a identificarnos con los hombres de la cinta amarilla incluso uno de ellos ya nos conocía y nos saludo, tantas veces nos había visto que le éramos familiares. Dentro de la mansión -porque para mis ojos eso era- todo estaba intacto, las cosas normales que tiene una casa en su lugar, mesa, televisor, muebles, pasamos en un pasillo de quizás seis habitaciones y bajamos las gradas para llegar al sótano, adentro nos topamos con el grandioso mediocre de Maddy estaba gritándoles a los criminalistas que solo hacían su trabajo.


-hay Dios –gimió molesto a uno de los hombres con bata blanca- harán que se venga toda la pared ¿A que fueron a la universidad?
-haaay podrías cerrar la maldita boca de una vez, por un demonio desconcentras –Respondió uno de ellos ya enfurecido- deberías lárgate a hacer tu trabajo, nosotros sabemos hacer el nuestro
-es verdad detective Khan –me incorpore prepotente- su trabajo está en toda la casa
-¿Qué hacen aquí?
-lo que tú no, trabajando –Le respondió Tyler mirando como los expertos en des entierros hacían lo suyo- Conocí a alguien que dijo “Si la tierra se pone amarilla” ¡Creo que era amarilla o no recuerdo muy bien! Es porque existe la probabilidad de que haya un cadáver dentro –Pregunto a los criminalistas-
-podría ser, aunque no siempre es así –Le respondió una mujer-


Maddy hizo una mala cara y salió, cuando los criminalistas terminaron de picar la pared el cadáver cayó al piso, pero tenía algo diferente ¡Sí! Como los demás una hacha incrustada en su cabeza pero esta no era igual que las otras, esta se veía nueva y un poco más pequeña tenia las calcomanías de tienda pegadas en el palo, creo que por fin hallamos un boleto de investigación más abierto, todas las anteriores eran hechas en casa, con un trozo de hierro filudo y un palo de madera adherido, eso siempre había sido el problema de hacer investigaciones como ¿Dónde las compro? ¿Quién? ¿Qué día? ¿Hora? Y todo eso, pero no es motivo de fiarse tanto ya que parecía como una señal o aun grito diciendo “Quiero ser atrapado” ¿Pero porque?

-¿cuánto tiempo puede que tenga el cadáver de estar allí? –pregunte en general para quien tuviera la voluntad de contestar-
-unas horas tal vez –Respondió la misma mujer cuando se levanto y me sonrió no tuve más gesto que responderle con otra sonrisa- El tipo pica la pared, cuando se trata de ladrillo quita bloque por bloque la simple presión provoca que quede como antes y en casas sencillamente abre el adobe y lo vuelve a colocar
-mmm supongo que ya sabía eso –dije sin quitarle los ojos de encima-
-¡Lo sé! –Añadió ella, levanto una ceja, me volvió a sonreír y salió por la puerta-
-Tyler se me acerco y murmuro-
-eres un bastardo –dijo mientras hacia posiciones locas y fotos al cadáver-
-¿Por qué? –Pregunte sin dejar de escribir el bendito informe-
-siempre te mira la chica linda
-no, cállate, tú, tu, tú tienes a, a, a Megan, la cual jamás la he conocido, do –balbucee-
-es linda –Dijo al instante de darse la vuelta y tomarme una foto repentina-
-¡Oye! –Gruñí cegado por el flash-
-¿Sabes que es lo mejor?
-¿Qué?
-¡Que es mía! –repuso con referencia a “Megan”-
-hooo felicidades chico suertudo –Le dije con tono irónico-
-también eres un zorro
-¿Sin rabo? –Pregunte queriendo ser gracioso-
-no, realmente lo eres –me plato muy serio-
-heeeee, eso es grosero y no es así
-tienes novia –dijo en tono convincente- casi te comes a esa doctora, te devoras a la periodista heee –emitió intentando recordar- Taylor con la mirada, Bill te he visto.
-eres un idiota –exclame ocultándome en la risa- Aprende a diferenciar, Taylor me busca y la doctora me sonrió primero ¡Piénsalo! Si soy descortés soy un maldito bastardo y si soy amable soy un maldito zorro ¿Qué mierdas quieren?
-creo que Mischa querría que le sean fiel por siempre –Replico haciendo con las manos un arcoíris arriba de su cabeza- hablando de Taylor no quiero ser grosero pero no encuentro otra palabra mejor para ella que PUTA, la vez, la vez pasada en el estacionamiento estaba con Damon y no precisamente charlando ¿Sabes a lo que me refiero? Claro sin contar la otra vez que la escuche hablar por teléfono, decía “Tom, Tom, no te enfades volveré pronto a Estados Unidos tengo mucho trabajo aquí, no te preocupes mi vida nos veremos pronto bla, bla, bla, bla -Trato de imitar la voz de la mujer la cual le salió muy chistosa por cierto-
-Taylor mmm Taylor es ¿Linda? –Respondí- y nos salvo la vida una vez ¿Lo olvidas? pero no me interesa en absoluto
-¿Sabes? Me recuerda a Marie –agrego con el ceño fruncido- a excepción de que era más vieja y se dejaba coger de cualquiera. Creo que un día me acostare con Taylor.
Tan pronto escuche eso guarde silencio un momento y no moví ningún musculo de la cara, creo que debo hacerme un examen preventivo por enfermedades venéreas lo antes posible.
-pues se lo diré a “Megan” –Dije formando comillas con los dedos-
-haaaa –Exclamo indigno- ¿Crees que Megan no existe? ¿Verdad?
-no dije eso, es solo que tenemos muchísimo tiempo de trabajar juntos y jamás he conocido ni siquiera tu casa
-prepara tu auto hoy conocerás a Megan –replico entre dientes-
-¿Enserio? –Pregunte mirándolo fijo como diciéndole ¿Estás seguro?-
-si –gruño- Vámonos, que se encarguen los forenses


Cuando salimos de la casa encontramos una rueda de personas tras la cinta amarilla, sus rostros estaban asustados, preocupados. Según los últimos datos, la mujer fallecida de nombre “Martha Schafër” tenían treinta cinco años y vivía sola, sus vecinos dijeron que nunca vieron a alguien con ella, absolutamente a nadie, hombre o mujer ni siquiera animal. Su muerte para todos era un misterio, para nosotros pulcramente era solo un acto más del asesino del gato negro. Antes de subir al auto para marcharnos hacia la otra casa el grato y amable detective Maddy Khan se nos acerco, estoy siendo sarcástico he.


-¿Adonde demonios van? –Exclamo el prudente-
-Heee disculpa pero, tenemos, fotos, notas, datos y enviamos lo demás al laboratorio ¡Trabajo hecho! –Respondió Tyler-
-no le hables, no tenemos por qué darle explicaciones a este farsante –dije mientras me preparaba para encender el vehículo-
-¡Cállate imbécil! –Grito Maddy-
-¡Oye! –Añadió Ty- No puedes hablarle a mi compañero así
-le hablo como quiera –respondió el otro-
Mientras que yo suspire molesto, golpee el volante, pero cerré los ojos y volví a suspirar para no alterarme- Escucha, estoy trabajando no me pondré la lidiar contigo aquí ni a seguir tú escándalo barato. Maddy porque no nos haces y te haces un favor ¡Regresa a Malasia! Creo que el cadáver de tu madre aun te espera, pudriéndose en una habitación después de que la mataron por zorra. Así es Maddy conozco tu vida –Dije firme y de frente-


El agente Khan me miro molesto pero creo que en sus ojos se pintaba también algo de tristeza frustrada, llegue a ese punto G que tanto amaba.
-púdrete Kravitz –grito de nuevo aun más molesto y golpeo con la mano el auto-
-así será –Dije riendo- por cierto, que gusto tan grande que el detective Parker se encargue del caso, porque tú no sirves para nada –le repetí lo que ya estaba claro, mientras el vehículo emprendía muy despacio-
-la verdad en ocasiones es un golpe más doloroso que el puñal –Agrego por ultimo Tyler-
Y el pobre mediocre se quedo tirando maldiciones a los mil vientos.


-te felicito –me dijo Ty- Haaa lo odio pero tú, tú le diste un trago de su propia medicina
-Ufff! No imaginas que desahogue más grande sentí
-bien, bien, bien


La siguiente casa se encontraba localizada a una cuadra de allí, a diferencia de la primera esta era más pequeña, una niña y niño lloraban cerca del columpio en el único árbol del patio, después un hombre de ojos rojos se tocaba la frente y hablaba con un policía.
El sótano estaba tras la pulcra cocina, ya habían sacado el cuerpo de la pared y al igual que la anterior el registro del hacha era el mismo. Esas dos herramientas para leña iban sin duda directo al laboratorio. Hicimos el trabajo lo más rápido que podíamos y salimos.

-¿Cuántos años tenía? Agente Trichet –Dije mientras le leía la placa en su camisa, este había sido el mismo que hablaba con el hombre cuando llegamos-
-tenía veintinueve y dos hijos de cinco y siete años
-hooo que triste –Dije tan seco mientras hacia el apunte- ¿Quién es ese hombre? –señale al dicho antes-
-era su esposo –respondió-
-Ho bien, adivino no sabe nada
-en efecto, las mismas incrédulas historias de siempre, dicen que salieron por la despensa desde muy temprano en la mañana, los dos niños se colaron y la madre quedo limpiando, cuando regresaron el agua esta hirviendo, la puerta del sótano abierta y se preguntaban dónde estaba ella, horas después vinieron unos policías tocaron la puerta y con toda la seguridad del mundo picaron la pared.
-haaaa eso es aterrador –Exclamo Tyler poniendo una cara de ojos saltones- Que alguien llegue así a tu casa requiere de mucho valor, Terrance, Terrance da miedo
-¿Desde qué horas salieron? –Pregunte queriendo saber más-
-05:00 am
-¿Tan temprano?
-creen que las compras matutinas deben ser ¡Matutinas! ¿No?
-claro si no, no serian “Matutinas”
-el gato negro ¿Verdad? –dijo el poli-
-me temo que si –confesé y torcí la boca-
-¿Cuándo terminara todo esto? –Se pregunto moviendo la cabeza de izquierda a derecha-
-no le voy a mentir, pero no tenemos idea
-ojala sea pronto –deseo con su voz alta, y un suspiro liberaba de su boca-
-créame que quiero que acabe esto tanto o más que usted
-la gente se está yendo de Sobieski, temen por sus esposas y sus hijas
-no los juzgo, tienen razón, si tuviera una hijo o esposa, es seguro que optaría por ello también –exclame-
-seria justa la pena de muerte en este caso, digo para cuando lo atrapen
-tal vez –añadí mientras melancólicamente miraba la casa- tal vez lo seria
-la muerte es una vuelta sin retorno ¡Que miedo!
-ja, supongo que tiene razón –tuve que admitir, eran las palabras mas sabias que habían entrado a mis oídos en todo el día-

El hombre sonrío, dio la vuelta y se fue. A la última frase me di cuenta que el príncipe es un gran exponente de ellas en cualquier modo, pero la poli… la policía es otra historia.
¡La esperanza es lo último que muere! Según dicen por ahí, a veces pienso que un día la matare.


El resto del tiempo intentamos seguir recolectando información en aquella libreta pero la gente inútil me agobiaba, al momento de ser útil se volvían más torpes, mi paciencia no estaba hecha para soportar semejante pendejes.

Lo bueno es que ya teníamos mucho de lo que necesitábamos y volvimos al departamento policial, a las siete en punto el informe estaba listo para ser entregado al teniente Girola, pero no se encontraba según dijo Mischa, andaba en una de esas conferencias de prensa tratando el tema del asesino. Entonces le agradecí a la más preciosa mujer por el aviso y baje a la primera planta donde me tope con un montón de policías rodeando el televisor de la entrada, la simple razón de esto era que se estaba proyectando la conferencia del teniente y junto a él estaba Parker muy bien posicionado y mirando fijo, aunque ya casi terminaba algo en mis adentros me dijo que debía seguir mirando escondido en las espaldas de los demás. El teniente hablaba un poco de lo siguiente.

“Jamás se había visto situación similar a esta aquí en Múnich, tratamos de entender la frustración de las familias que han sufrido dolorosas perdidas así mismo les damos nuestro mayor pésame, este problema se resolverá ténganlo por seguro. El hombre presente un perfil bastante bajo hemos tomado un informe de una hipotética apariencia del sujeto que junto a los investigadores concluimos”
-cabello rubio, piel blanca, fornido usando pantalones flojos y tal vez una chaqueta de cuero –Dije al mismo tiempo que el teniente, hooo que halagador momento, ese había sido el informe que hicimos Tyler y yo hace unos días. Mi táctica de imaginar el perfil de los asesinos en un don que no revelare porque ni yo mismo comprendo


-Entiendo que esta es la tercera conferencia desde el inicio del caos –Siguió diciendo- Hemos interrogado la mayoría de personas en el barrio pero simplemente algunas no quieren cooperar, así que volvemos a pedir ayuda si alguien sospecha o cree saber quién es este tipo llame a nuestro número secreto 468756 repito 468756 No queremos más muertes en esta ciudad.

Capitulo 20 (80) 3era Temporada

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Buenos días –Saludo con voz fuerte el teniente y prosiguió- Los hemos invitado a esta reunión por una grata razón, es la de presentarles oficialmente a un nuevo integrante de la central de Múnich. El detective estadounidense de la ciudad de Minnesota, tiene un talento especial aparte de descubrir criminales –Dijo caminando de un lado a otro y pauso- Tal vez esto suene un poco ...inusual para la policía, pero este hombre es realmente diferente, posee algo que ninguno de vosotros tiene ¡Es médium! – Soltó la sorpresa y al meterse esas palabras en los odios de todos se miraron entre sí destilando asombro- El estará a la cabeza de las investigaciones del asesino del gato negro, ese fantasma que desde hace mucho tiempo esta atormentando una buena parte de la ciudad, la INTERPOLL no quiere tomar el caso, las criticas nos llueven y no importa todo lo que planeemos, hagamos o todas esas personas encubierto que tengamos en diferentes puntos, el tipo no decae, no desenterramos otra alternativa que darle paso a la “Fantasía” Para tal vez obtener una pista que nos ayude abiertamente, el detective ya está aquí su nombre es “Terrance Parker” Mejor conocido como el detective Parker. Debéis hacer lo que él te pida respecto al trabajo siempre y cuando se trate del caso ¿Entendido?


Se escucharon unos cuantos si ante la pregunta y el teniente hizo pasar a “Terrance” Un hombre alto, blanco muy joven tal vez mi misma edad veinticuatro años detectables, delgado más de lo que debería, con cabello castaño hasta los hombros, vestía muy mmm ¿Cómo decirlo? Muy ¿Fino? Saco y corbata pero no le quedaba mal, directamente entro tratando el tema nos dio algunas indicaciones nada que no supiéramos antes sin embargo no menciono algo de su “Poder especial” Así era mejor debido a que no es normal, la forma en la que dialogaba se presentaba y todo lo que decía poseía un dialecto muy profesional incluso el solo verlo hacia que fuera imposible llegar a desagradarle a alguien. Contesto la mayoría de preguntas que los demás hacían y la presentación paso a ser una reunión de hipótesis, por supuesto, como dignamente debe ser Tyler y yo participamos de ella con una cuantas opiniones, se plantearon varias nuevas teorías e ideas un poco extrañas pero brillante, se dejo de lado el cuento y se abordo el misterio más independiente, fue la reunión más larga a la que haya asistido sin embargo el tiempo se paso volando.


Esa misma mañana teníamos más del gato negro, el tipo no paraba, en verdad era uno de los más grandes asesinos con los que la central se halla topado, hasta la fecha sus víctimas sobrepasaban las treinta mujeres, todas torturadas de la misma forma, mientras que huellas o minúsculas pistas eran casi imposible detectar.
Puedo asegurar que he llegado a desarrollar cierta admiración por él maniático, pero eso no quiere decir que espume mi deseo de atraparlo. No tengo ningún problema con su delicado e ingenioso trabajo, pero mi novia puede correr peligro.
Todo lo que los investigadores reúnen es la mitad del uno por ciento de lo que ocurre, la cuestión se dibujaba como un caso imposible de descifrar, las criticas e insultos para la policía son el pan de cada día nos calificaban de incompetentes incluso la columna de Amanda Stöch en el diario matutino “Hallo Múnich” nos critica hasta la ropa y ahora con el detective Parker la fe a crecido para nosotros y tal vez una luz aparezca en el fondo de las paredes demostrando su habilidad como médium será útil.
Ya sé que las cosas no son así de sencillas para un psíquico, existen ocasiones en las que simplemente no ven nada, pero Parker ese menudo hombre que llego esta mañana transpira buen potencial sin lugar a duda; por otro lado en lo que a mí concierne no puedo acercarme a él, de cualquier manera tratare de esquivarlo con cada oportunidad y si por obvias razones cruzamos palabras seré breve y cortante con la cabeza enterrada en la tierra como los avestruces. Terrance Parker me pone la piel de gallina.


-Hey Kravitz- Grito un hombre a mi espalda, rápido vire la cabeza y mire al detective Matthew correr, debí suponerlo era la única persona que me llamaba por mi apellido -
-¿Qué sucede? –Dije cuando me detuve-
-¿Recuerdas a Darwin? Tal vez es un poco perturbador para ti recordarlo pero tengo algo –añadió-
- ¿Qué? ¿Cómo que tienes algo? ¿Qué encontraste? –Pregunte muy interesado-
-veras, ayer después de todo el lio de bomba, balas y esas cosas –Dijo haciendo ademanes con las manos- unos oficiales y yo fuimos al lugar de donde fueron desenterrados huesos, de probablemente el carnicero ¿Recuerdas? se supone que se fugo o lo raptaron, la historia es que ya no se le dio mucho seguimiento a su paradero. Llevamos los huesos al laboratorio forense y hoy esperamos la confirmación, de ser Darwin se impondrá una búsqueda a su asesino –concluyo de manera alegre-


No sabía que responder, oír a Matthew decir que buscaran al asesino me dejaba atónito y confundido, era poco pensar que pequeño es el mundo, tanto como para ser que con él hablaba precisamente.

-hooo ¿Dónde los encontraron? –pregunte-
-los reportaron unos chicos exploradores que hacia su rutina de salvamento en el bosque ¡Que trauma para esos niños! –Exclamo con lastima-
-mmm –Masculle- pero… -agregue y mordí el labio superior- Solo era escoria social, además no creo que existan muchas personas que lo conocieran ¡El las mataba!… -Suspire y cerré los ojos- He yo no sé qué decir
-en lo de escoria social tienes toda la razón, pero somos la policía y debemos hacerlo ¡Obligación pública!
-¿Quién se encargara de eso?
-todavía no sé, pero creo que estaré en el caso
- y… ¿Ya tienen algo? –Dije de forma discreta-
-Haaaa aun no, pero nos esforzaremos para juntar pruebas, de todas formas siempre tenemos una investigación a la vuelta de la esquina –proclamo lo cual me provoco pintar una sonrisa nerviosa- te desearía suerte, pero creo que no la necesitaran
-mmm mejor deséamela, esto será difícil –Exclamo en son de broma por lo cual rio-tanto tiempo enterrado, sin ningún signo de vestimenta –Suspiro- ¡Ufff! No será un juego de damas chinas, Kravitz –Lo dijo en tono de comentarista público-
-entonces suerte –Replique mientras empujaba mi lengua y me hacia tragar saliva. El detective se me acerco más y poso su mano en mi hombro-
-descuida Bill siéntete feliz existe un 90% de probabilidades que tu secuestrador ya esté muerto
- <<Eso ya lo sé idiota, yo lo mate>> Si –Dije suave y baje la mirada tratando de esconder una maliciosa sonrisa-
-bien señor Kravitz, nos vemos luego –conjeturo, dio la vuelta y se marcho-
-claro –agregue a su ignorancia-


Siempre he pensado que si cometes varios crímenes, en este caso “Asesinatos” y por lógica quieres deshacerte de la evidencia, nunca juntes los cuerpos como pila, porque así cuando llegue el momento de que alguien los descubra tendrás menos líos y menos probabilidades de que den contigo, piénsalo al juntar todo haces que se concentren mas en el caso, sin embargo al hallar solo uno la investigación es reducida ¡Es escuela básica de asesinos en serie! Yo tengo unos por aquí, otros por halla, este tema de los huesos de Darwin no me abate en absoluto, además conozco a los policías y con todos los graves homicidios que caen sobre la mesa del teniente y el comandante la muerte de un carnicero sentenciado a cadena perpetua será el último punto en la lista a excepción de que un detective como Matthew quiera tratar el caso en su tiempo libre, pero me pregunto ¿Para qué perder el tiempo?


Proseguí buscando a Tyler para irnos, desde que termino la reunión se había espumado. Pero regrese molesto al cubículo, me pudría que siempre se perdiera por ahí.
Aproveche la llegada para tomar papel, la cámara y lapiceros este día debíamos ir con el recién llegado detective “Parker” Para encontrarnos con la nueva sorpresa del asesino del gato negro y daríamos un tour al estadounidense por los lugares donde se han efectuados otros crímenes del mismo autor.
Poniéndome la mano en la cabeza, recordé que ha pasado mucho tiempo desde mi último asesinato y todo por estar cuidando a Mischa como si fuera una persona inútil; me senté abrumado en la silla provocando que se moviera y diera de golpe en la pared, miraba fijamente una bandera de tela alemana pegada en la esquina de la mesa cuando de repente el adorno patriótico comenzó a moverse como si alguien estuviera soplándolo con la boca, eso me hizo ponerle más interés y no quitar los ojos solo que esta vez con la boca un poco abierta y el ceño un tanto fruncido, el suceso fue minúsculo de tal vez unos doce segundos, sin embargo solo era la introducción de lo que se vino; una pequeña pila de papeles que estaba en medio de la mesa salió volando en dirección a mí, como que si alguien les diera un manotazo y te los lanzara encima, me levante de brinco y e hice a un lado de la puerta, mire el papelero en el piso y dude un poco si recogerlo o no, al fin y al cabo siempre tuve que levantarlo, suspire y me sentí un poco mal, me refiero a eso de sentir mareo y que la sangre se me congela, los mismos síntomas de hace años, cerré los ojos y di pasos hacia atrás, me jale el cabello y le solté una patada al bote de basura, puse mis ojos en una taza que se encontraba encima del escritorio, no era mía si no de Tyler el utensilio hizo un ruido raro ¿Cómo decirlo? ¿Crujió? ¡Si crujió! Y se rajo de la nada, en mi mismo delirio la tome y la lance contra el suelo. Me volví a dejar caer de impulso sobre la silla, me tape la cara y baje la cabeza a las piernas, mis subconsciente en mi mundo psíquico o científico psicológico luchaba con espada y armadura contra la demencia que me domino un tiempo, no podría dejar que llegara de nuevo ¡No ahora! Intentaba calmarme cuando sin percatarme Tyler ya estaba en la puerta mirándome asustado.


-Heee ¿Bill te sientes mal? ¿Qué paso aquí? –Pregunto medio asustado, sin pensarlo dos veces camino de inmediato hacia donde me encontraba-
-yo… -Replique y lo mire sin embargo me sentía aun fatigado, sudado, confundido- yo no sé –Dije y pase empujándolo, me fui al baño mientras que frente al espejo espere calmarme, pero Tyler volvió aparecer.


-Bill ¿Qué te ocurre? –Conjeturo desde la puerta-
-nada –Dije tajante-
- oye, si no me quieres decir está bien, pero Bill debemos irnos ya

Suspire con la boca como cuando dirás algo pero lo retienes, apuñe y abrí la mano, me mire al espejo, guarde la postura y hable.

-Ty yo… -añadí e hice una pausa- Yo, veras, antes cuando era pequeño sufría de ataques un poco extraños, muy similares a ataques de nervios ¿Entiendes? Pero supe controlarlo, sin embargo allá adentro, empecé a sentirme un poco mal… -Explicaba la mentirota mientras me secaba las manos, pero Tyler me interrumpió-
-entonces ¿Te volviste loco, quebraste mi tasa, lanzaste el bote de basura y te agitaste?
-bueno cuando llegue el basurero ya estaba así, sobre la taza realmente lo siento y mi agitamiento es causa de lo que te acabo de contar, pero no te preocupes no es nada grave solo cuestión de unas dos pastillas y listo.
Tyler bajo la mirada y dijo- vaya no sabía eso sobre ti ¿No es muy frecuente? ¿No?
-hay no, para nada –Respondí con una sonrisa, empujándolo a salir junto a mi- nada grave o importante
-pero hoy como que se te salió de control
- no Tyler, nada de eso, es mas deberías olvidarlo no fue nada
-mmm –Mascullo- Lo que tu digas –Finalizo y cambio el tema- ¿Sabes qué ya deberíamos estar en la calle “Klein”? Es muy tarde, si Girola o el comandante Kendall nos ve aun aquí nos fulminara
-descuida llegaremos en lo que canta un gallo.



Llegar a la calle Klein aun en el barrio Sobieski nos llevo menos de 20 minutos, tan solo era cuestión de transitar por la avenida 87 y doblar en TravisDash usando la ruta alterna de Sobieski -valga la redundancia- El terreno baldío de esta ocasión no le llamaría precisamente un “Terreno baldío” Si no más bien una casa destruida donde únicamente sus sobrevivientes eran las paredes.
Cruzábamos la cinta amarilla cuando el detective Parker se nos puso enfrente ¡Vaya sorpresa!


-buenos días muchachos –Dijo con un sonrisota que me erizo hasta los huesos- Aunque creo que quedo clara la amable presentación que hizo el teniente Girola sobre mí, me presento personalmente soy Terrance Parker.
–Nos saludo a mano extendida, ver su mano blanca queriendo que la mía la estrechara me hacía verlo como mi enterrador, pero no podía dejarlo así la cortesía debía ser respondida, permití que Tyler sujetara primero al saludo luego fue mi turno Parker me miro y sonrió. Creo que yo mismo me volveré loco temiéndole a este hombre ¿Qué me pasa? ¡No nací para temer, naci para que me teman!
-un gusto conocerte –Dijimos-
-gracias chicos –agrego- ¡Volviendo al trabajo! Acabamos de sacar una mujer de esa pared tenía la típica hacha clavada en la cabeza –Dijo tocándose la de el- Esas caras de felino son tétricas, ¡Ash! –Emitió.- y si, ya vi todas las demás víctimas del asesino –Replico y comenzó a caminar hacia el lugar de los hechos, tuvimos que seguirlo- Desde hace mucho tiempo me he dado la tarea de investigar y creo que es uno de los más grandiosos asesinos de Alemania, Europa ¿El mundo? Es un boom en internet me sorprende que la INTERPOLL le importe un carajo, si fuera Estados Unidos el FBI movería mar y tierra para atraparlo.
-pero no es Estados Unidos –Solté las palabras tratando de defender mi país- Además es un caso sin mucho disturbio
-¿Sin mucho disturbio Bill? –Dijo indignado Tyler- ¡Por favor! A matado a más de veinticinco mujeres en un periodo de menos de un mes ¿Te parece poco? Piénsalo un día podría ser alguien que conozcas, estas mujeres salían de casa muy tranquilas, se cruzaban la calle y desaparecían, horas después resultan dentro de una pared ¿Muy ingenioso? ¿No? –Dijo las últimas frases haciendo su voz más patética-
-heee creo, creo que el oficial “Goethe” –Proclamo Parker leyendo la placa de Ty- Tiene razón y agente Kravitz ya sé que aquí no es Estados Unidos, creo que aquí es mejor,

-Sus palabras me hicieron levantar una ceja-
Pero ¿Cómo puede ser que un hombre mate continuamente y no deje huella alguna? Y perdóname pero es la verdad, es una incompetencia por parte de organización anti crimen europea no querer tomar el caso
-no, ustedes no me entendieron –defendí- no me refería a que no sea grave lo que hace si no que el tipo no incendia casas o edificios no se qué ocurre con la INTERPOLL ¡No se! Con solo tres crímenes ya se involucran pero ahora no quieren ser parte ¡No se!
-¿Y sabes quién tiene la culpa? –Propuso mi compañero-
-nadie tiene la culpa, Ty
-sí, sí la tienen y es comandante Kendall
-¿Kendall? –Dijo Parker incorporándose-
-si “Kendall” el es “Ex” agente de la INTERPOLL y claro dijo una vez que no quería que ellos se entrometieran
-Heee no creo que las cosas sean así Ty –Replique entumeciendo los ojos- Nadie tiene la culpa
-se que apenas esta mañana me incorpore pero no creo que sea adecuado culpase unos a otros por esto, menos a un comandante tal vez solo quiere demostrar que pueden hacerlo –replico el detective-
-¡Podemos! –Corregí-
-claro ¡Podemos!
-pues su demostración le está saliendo muy cara y no a me refiero a dinero
-escucha, investiguemos y sigámoslo haciendo pronto, un día caerá –alenté-
-ténganlo por seguro, yo pondré todo lo que este de mi parte, incluso el tiempo libre para indagar en ello –añadió Parker-
-¡Esa es la esperanza! –Repuso mi compañero- Ojala que “Un día” Podamos meter el fantasma en un frasco de embutidos–Dijo y viro los ojos- ¿Detective piensa que podría ser el asesino perfecto? ¿Harán una película de él? ¿Saldrá en libros y en halloween se disfrazaran de él?
-haaaa, no sabría decirte eso–respondió añadido de una sonrisa perpleja- pero hay algo que si se, acabo de enviar agentes a dos casas cerca de aquí –agrego de manera extraña mientras que hacia sus ojos penetrarnos- hay una mujer muerta en cada pared de su sótano –concluyo asustado-
-mmm ¿Podría preguntar cómo es que lo sabe? –Dijo Tyler frunciendo el ceño, era extraño debido a que solo existía un cadáver reportado-
- ha, no es un secreto y creo que ya están informados sobre ello –exclamo el detective, con referencia a su “Poder psíquico”- tuve una visión tétrica con este cadáver –Señalo- pero no es que yo haya querido solo paso, fue triste y corto, quiero que ustedes vayan a esta dirección –replico entregándome un papel- Ya hay oficiales bloqueando la casa, ustedes hagan lo suyo.
-está bien –le respondí de manera extrañada-
-lamento enviarlos halla, pero llegaron muy tarde ya nos estamos encargando de acá –dijo mirándome muy fijo, he inmediatamente baje la mía-
-descuida, ir a casas que probablemente queden malditas es nuestra especialidad ¿Verdad Bill? –Exclamo Tyler, pero me mordí la lengua antes de agregar palabras a su comentario-
-sí, si –Respondí lleno de poco interés, mientras volvía mirar al detective-
-excelente, suerte chicos –Despidió e hizo un saludo militar, el de la mano en la frente-