lunes, 23 de abril de 2012

Capitulo 16


                                                            ●▬▬▬▬▬๑۩۩๑▬▬▬▬▬▬●

Llegue al alberca caminando despacio, deseaba ver a mi hermano saber que tan peligrosa era la información que poseía acerca del asesinato; no pienso arriesgar el pellejo por ningún motivo. Menos por uno tan absurdo como lo es Tom.
...




-¡Tom! –Grite bajando por las gradas del enorme salón donde se encontraba la gigantesca piscina-
-¿Qué quieres? –me pregunto-
-¡Necesito hablar contigo!
-¿Hablar? ¿Tu? ¡Por favor! Lárgate no tengo ganas de discutir
- sal de allí –Le grite-
- ¡No! –respondió rotundamente-
-está bien, está bien –Replique y mire mi entorno asegurándome que no hubiera nadie- puedo hacerlo desde aquí ¡Escucha! No sé de donde sacaste la absurda idea que me dijiste hace rato, pero será mejor que la borres o te ira mal
- ya te dije que te largues –Exclamo sin respuesta a mi comentario anterior-
-¿Qué no me escuchaste? No te metas en mi vida, mucho menos toques temas tan peligrosos como esos
-¿A qué te refieres exactamente? –Dijo el-
-no te hagas el inútil ¡Ya sabes de lo que hablando!
-oye Bill ¿Cuál es tu punto? Si “Casi juras” que no tienes nada que ver ¿Por qué te preocupa tanto? ¡Es solo un hombre! ¡Solo una vida! ¡Nada importante! ¿Verdad? Un objeto a tu forma de ver
-ya deja de acusarme ¿En qué te basas? –Dije entre dientes-
-en que soy tu hermano ¡GEMELO! –Enfatizo- ¡Te conozco! ¡Estas enfermo! ¡Por Dios! Intentaste asesinarme a mí que llevo tu sangre ¿Y él? ¡Siempre lo detestaste!
-no se dé que hablas –Fingí y fruncí el ceño-
Tom se harto hizo una mirada cargada de rabia, salió del agua y llego rápido a tomarme del cuello, me tiro contra la pared y dijo:
-¡Mierda! ¿Crees que soy estúpido? –Exclamo con gruñido incluido-Sé que tú fuiste quien mato al psicólogo ¡Lo percibí!
-suéltame Tom –Replique como reteniendo la erupción de un volcán-

Mi pulcro hermano dejo escapar un profundo suspiro mientras desligaba su mano de mi cuello. El fuego de mis ojos se clavaba en el.


-sí, Tom –Dije- si fui yo y será mejor que cierres la boca o serás el próximo
-no te tengo miedo, la única razón por la que no diría nada es porque sé que tú mismo te terminaras destruyendo –Respondió-
-¿No me tienes miedo? Pues deberías
-sigue soñando

Excusando mi drama esta vez fui yo quien lo tomo del cuello y lo empuje al lugar donde me retuvo. El no reaccionaba solo me miraba fijo mientras lo contraminaba con el frio concreto


-no me importa que no me tengas miedo pero desde ahora te advierto que si le dices a alguien eso, te ira muy mal hermanito no tienes ni idea de lo que te podría hacer; si eres inteligente como dices y sabes lo que te conviene será mejor que no habrás la boca, porque lo que le ocurrió al doctor no es nada comparado a lo que yo te podría hacer a ti. –Dije muy seguro de mis palabras-

Tom movió enojado mi mano de su garganta y sin repetir más que “No te temo” se largo. No reacciono como esperaba no se asusto solo expreso una mirada decepcionada, no le importo mi amenaza. Aunque en el fondo estaba seguro de lo que soy capaz.
Por otro lado creo que fui un estúpido al afirmar sus sospechas y es que el enojo me dejo recorrió.


Regresaba despacito a mi habitación con la idea de bajar en cinco minutos nuevamente, pero al pasar en recepción me percate de Terry a una breve distancia, lucia tan inocente y pura era justo lo que quería. Estaba intentando abrir la puerta de una habitación entonces decidí hablarle


-¿Necesitas ayuda? –Pregunte amable, de pie a su lado derecho-
-ho,hola no, claro que no –Respondió con el mismo nerviosismo de antes-
-¡La puerta te da dificultades he!
-no, bueno sí, bueno siempre es así –Dijo, movió la cabeza de arriba abajo y se mordió el labio-
-ok! Entonces mejor dejo que sigas haciendo tu trabajo
-hooo si, gracias ¡Adiós!
-adiós nos vemos luego
-seguro –Replico por ultimo-

Terry actuaba temerosa ¿O nerviosa? al verme, tartamudeaba y sonrojaba. Realmente si me llamaba la atención y tengo la certeza de que podría lograr algo con ella. Mmm también esta Christina creo que se enfada cuando conozco una mujer, pero debe saber que es mi vida ¡Aun tengo pulso! Ella es alma que solo yo percibo, solo yo veo, solo yo acepto jum ¡Rayos! Siento como me acosan los sistemas del más allá. Mi mundo gira alrededor de la demencia y ahora más que nunca la catastrófica intención se ha iniciado.


Sin asombro elocuente transcurrió la mañana, por la tarde llegue a la cita con el psiquiatra un tipo de algunos treinta años conocido como Engel, lo supe por la placa en su escritorio. Fingía escucharlo pero en realidad me llamaban más la atención los cuadros colgados en las paredes; enormes pinturas aparentando ser salpicaduras de sangre. Después de una hora y media salí del consultorio y comencé a conducir lentamente por las calles de los rascacielos. Escuche un sonido fuertemente agudo en mi cabeza y no se me ocurrió decir algo mas que -Lárgate Christina- entonces el ruido desapareció sin embargo ella ya iba en el asiento trasero

-¿Qué quieres? –Le pregunte sin apartar la vista de la calle-
-¿Cuáles son tus intenciones para con Terry? –pregunto ella-
-no te metas Chris –Advertí- esto es asunto mío ¡Creí que había quedado claro!
-¿Diversión con ella no?
-hablas como si fueras una mujer mayor niña, ya ¡Lárgate! Estoy conduciendo
-eres grosero ¿Sabes? –Dijo soñosa y metió un tema que en ocasiones me parece absurdo- ¿Lo olvidas? ¿Olvidas quien pudo haber sido el amor de tu vida?
-claro “pudo” –Exclame-
-¿Pudo? ¡No! Así será hasta el último día ¡Debido a eso sigo contigo!
- Chris lamento tu tragedia, lamento tu muerte y lamento más no estar muerto también, pero tú y yo no podemos estar juntos ¡Ya entiende eso!
-no, comprendes, tengo infinitamente claro que jamás estaremos juntos en esta tierra, pero el destino no se puede cambiar Bill–Concluyo y desapareció-


Me parquearme en un restaurante. Entre por café y donas.
Ese mismo día conocí a una mujer de nombre “Ruth” llego a mi preguntando si podía sentarse en la misma mesa donde me encontraba la típica esquina, le dije que sí y comenzamos una charla; la verdad es que termine follando con ella por la noche. Y como había dicho antes no esperaba amor para acabar acostándome con chicas ¡Abiertamente zorras! Durante unos días; pero mi deseo siempre seguía concentrado en Terry sin embargo era a la cual menos le interesaba los nervios para conmigo se le habían espumado y llegue a sentir de cierto modo que la estaba acosando ¡Cosa que no me importaba! Pero estaba llegando al punto de aburrirme; me había decidido tenerla quisiera o no.

Una noche cuando regresaba de mis citas con el psiquiatra, estacione en el parqueo y al poner un pie fue del vehículo me llegaron regresiones de lo que había ocurrido en ese lugar, de lo que yo había hecho, el dolor, la sangre mi euforia la navaja baja piel.
Mi mente quería estallar, me delimite a ver y me coloque la mano en la frente la mantuve así aproximadamente veinte segundos, pero al abrirlos mi sorpresa fue: la mujer que me tenía obsesionado desde hace unos días ¿Qué hacía allí?


1 comentario:

  1. 0.0 que intriga!!! Uy,Bill cada vez mas se vuelve peor :s a ver que pasa por que esto no me da buena espina :o uff,bueno bye Krizz :DD

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